Andrés Arconada recomienda 'Crossing': "Una historia que emociona y trasciende, más allá del cine comercial"

Antes de nada, quiero decir que me gustan mucho las películas llamadas independientes, que otros califican de pequeñas, pero que son esas que no gozan de una gran promoción y que a veces se estrenan en pocos cines. Lo bueno es que se suelen emitir en plataformas poco después de su paso por las salas, logrando una buena visibilidad. Este es el caso de Crossing, de nacionalidad georgiana, dirigida por el cineasta de origen sueco Levan Akin, director que ganó el premio Teddy en la última edición de la Berlinale.

Crossing nos habla de un viaje que va a transformar a través del amor a todos sus personajes, centrándose en Lia, una profesora jubilada que vive en un pequeño pueblo de Georgia. Esta mujer verá cómo su vida se transforma cuando un vecino le habla del posible paradero de su sobrina, de la que hace tiempo no sabe nada. Prácticamente con lo puesto se dirigirá a Estambul para encontrarla. Su búsqueda por la ciudad más poblada de Turquía será transformadora y agónica para intentar descubrir qué ha sido de su familia.

La película aborda muchos temas, como el de la aceptación o la empatía con algunas de las personas que va a encontrarse en su camino, algo por otro lado común en la filmografía de su director. Lia sabrá abandonar sus propios prejuicios permitiendo que un joven sin rumbo la acompañe en el viaje al tiempo que le servirá de intérprete y le ayudará a abrir los ojos, no sólo a otra cultura sino a sus propios sentimientos. El tono de la película, como señalan otros compañeros, se acerca al neorrealismo italiano comparando la interpretación de su protagonista con las que hacía la gran actriz italiana Anna Magnani. Todo un piropo, no sólo al personaje central, sino a la actriz que lo protagoniza, Mzia Arabuli.

Aunque a veces se repite en algunos de sus pasajes y determinadas secuencias puedan ser prescindibles, Crossing sigue siendo una buena película, muy recomendable para todos aquellos que buscan historias que trascienden, emocionan y quedan grabadas en la memoria de ese espectador que busca más allá del cine puramente comercial.

Por qué no ver 'Joker: Folie à Deux'

Algunos os preguntaréis cómo no hablo de la estrella de la semana, Joker: Folie à Deux. Muy sencillo, en esta columna semanal pretendo comentaros sólo aquellas películas que merecen vuestro esfuerzo y dinero a la hora de ir al cine. Es imposible recomendar una mala película como Joker: Folie à Deux, y no lo digo yo, sino la mayoría de la crítica mundial que la ha señalado como una de las peores secuelas de todos los tiempos. Esta historia, que comienza donde acababa la primera entrega, apenas tiene ritmo e historia, las canciones cantadas por Lady Gaga, al igual que Joaquin Phoenix, no tienen demasiado sentido y, lo que es peor, aportan poco a la trama principal. Por todo, Joker: Folie à Deux es una película que no puedo recomendar.