Marina Rivers empezó mal con Ana Rosa, pero ahora es su gran defensora: "Es la mejor, una titana de la televisión"

Marina Rivers es una de los influencers más populares de nuestro país, pero se está dándose a conocer también en televisión. Primero debutó como colaboradora de TardeAR y ahora es concursante de Masterchef Celebrity. En el programa de Telecinco está a las órdenes de Ana Rosa Quintana, con quien ha hecho buenas migas a pesar de que ella creía "que no nos íbamos a caer bien". Ha resultado "todo lo contrario". "Es la mejor; una titana de la televisión", defiende Rivers, que comenzó con muy mal pie con ella cuando protagonizó una metedura de pata en La Resistencia. "La cagué llamándola abuela", recuerda.

¿Qué es lo que pensaste al recibir la propuesta de Masterchef? ¿Te lo pensaste mucho?

Me lo pensé bastante, porque estoy terminando la carrera. Además, me coincidía con el final de curso. Me agobié un poco, pero como soy una loca dije: '¡Venga, sí!'. Y me apunté, como siempre.

¿El aspecto económico ha influido a la hora de decidir?

No, porque lamentablemente gano más haciendo lo mío [Risas]. O igual es que tengo un caché muy bajo.

¿Cómo has llevado las criticas de los jueces? ¿Quién ha sido el más duro?

Les admiro de verdad porque tienen un estómago de fuego. Se han comido cada basura... El duro es Jordi, pero es el que mejor me cae porque es sincero y a mí me gustan las personas que te dicen las cosas como son. Es un peluche, realmente. Va de duro, pero luego te da un abrazo detrás de las cámaras y te dice 'no pasa nada'.

¿Entiendes las críticas de otros concursantes que han pasado por el programa?

Hay que saber dónde te metes. Si vas a un combate de boxeo te expones a que te den una hostia, mi amor. Personalmente, tienes que hablar contigo mismo. 'Oye, a lo mejor no estoy preparada. O sí'. Yo, que me considero una persona muy competitiva y que me molesta mucho hacer las cosas mal, he aprendido mucho a trabajar la frustración en este programa. Es imposible ser la mejor cocinera en una semana. Tenemos mucho ego y nos cuesta gestionar el perder y que las cosas no salgan como esperamos. Somos mucha gente que nos dedicamos a cosas muy guays y, de repente, esto es muy duro. Hay que aprender a disfrutar del fracaso. Se aprende mucho más del fracaso que del éxito.

Entonces, no os han apagado el horno mientras cocinabais...

¡Que va! Eso es mentira. Mira, yo he llegado a mi casa y he dicho: '¡Qué mierda de horno tengo!'. En Masterchef funcionan los electrodomésticos, tenemos una cantidad de bártulos...

Pero no ha aparecido nadie de repente que te lo apague a propósito...

No, por favor. De verdad, eso no lo hemos visto jamás. Hablo por mí. Somos unos inútiles. Yo me he peleado con una cantidad de electrodomésticos... Te pones nervioso y te crees que está roto. Luego te das cuenta de que no habías enchufado la batidora.

¿Estás abierta a más proyectos en televisión? ¿Realities?

A los relities ya cierro la puerta, creo. A mí me gusta mucho la televisión y me gustaría seguir con mis proyectos y mis cositas en TardeAR.

¿Qué tal es Ana Rosa como jefa?

Es la mejor. Yo pensaba que no nos íbamos a caer bien y todo lo contrario. Ya la cagué en La Resistencia llamándola abuela, pero es una persona que siempre se ha preocupado por mí, sobre todo por mis estudios. Me pregunta por los exámenes. A nivel personal, es una tía súper cercana y le agradezco mucho estar en un programa con ella. Es una titana de la televisión y me está enseñando muchas cosas.

¿Te da libertad absoluta?

¡Lo que me da la gana!

Estuviste en La Resistencia, ¿qué opinas del fichaje de La Revuelta?

A mí Broncano me encanta, es un tío fresco.