Rubiales, tajante: "Ni he recibido mordidas de Piqué ni he estado con prostitutas"

Muy moreno, vestido con ropa deportiva y sentado en un paradisíaco jardín. Así ha reaparecido Luis Rubiales este miércoles en El objetivo, donde ha mantenido un tenso 'cara a cara' con la periodista Ana Pastor, a la que ha espetado en varias ocasiones: "Si cada vez que quiero hablar me interrumpe, esto es imposible, señora Pastor". Entre tiras y aflojas, el ex presidente de la Federación, que ha aterrizado este miércoles en España, habló sobre todas las polémicas que arrastra desde el pasado Mundial de Fútbol Femenino y que le han llevado ante la justicia: desde el beso con Jennifer Hermoso hasta las supuestas comisiones ilegales por las que está siendo investigado.

Rubiales negó haber participado o autorizado los contratos presuntamente irregulares durante su etapa como presidente de la RFEF: "No sé lo que están investigando porque no tengo el Sumario. Estoy aquí para decir que es mentira que haya pegado una mordida con la construcción de pisos, que tenga un equipo de beisbol, que tenga terrenos en Arabia Saudí...". Tajante, afirmó: "No me he llevado ninguna mordida de Piqué, él jamás me ha ofrecido nada. Tengo muchas ganas de hablar con la jueza, no tengo nada que ocultar".

El ex futbolista también se desvinculó de Gruconsa, la constructora de su amigo Nene, a la que se asignaron varias obras desde la RFEF: "No tengo nada que ver con esa empresa, nunca he trabajado con esa constructora, si pasó los filtros y los concursos de las personas que supervisaron todo, ¿qué problema hay? En este país no hay presunción de inocencia". Rubiales lamentó el "linchamiento mediático" al que se ve sometido: "Tengo todas las cuentas bloqueadas, no puedo comprar ni un refresco y nadie ha demostrado nada. Hay una corriente devastadora y demoledora contra cierta gente sin haber demostrado nada". Y añadió: "Tenía unos ahorros y todo el dinero que tengo en mis cuentas era producto de mi trabajo. Actualmente no tengo ingresos".

Sobre Jennifer Hermoso, mantiene su relato de que aquel beso fue un acto espontáneo "entre amigos" y que no hubo agresión sexual porque hubo una pregunta por su parte y una afirmación por la de ella: "Ella dijo que había una relación de confianza. No había nada sexual. Ahí está todo. Ella salió a desmentir que hubiera nada y después cambió su versión pero no lo hizo en el avión, como ha dicho, lo hizo una vez que habló con gente de fuera". También se defendió de las informaciones que apuntaban a que organizó fiestas con señoritas de compañía y dinero de la Federación: "Si me pusieran un suero de la verdad y me preguntaran si he estado con prostitutas les diría que no. Las relaciones que he mantenido siempre han sido entre dos adultos de forma voluntaria".

Su nueva vida en República Dominicana

Rubiales se trasladó a República Dominicana antes de Navidad para emprender algunos negocios que ahora se miran con lupa y que él defiende con uñas y dientes: "¿Por qué no puedo estar aquí? No me apetecía estar en el foco, quería empezar de cero, conocer gente y poder ganarme la vida fuera del fútbol. Desde mi banco me dicen que no quieren seguir trabajando conmigo y tuve que buscarme la vida para que mi familia siga adelante. Aquí hay muchas oportunidades, es un paraíso pero no fiscal, todo el dinero que he trasferido de mis cuentas ha cumplido con un estricto proceso de revisión. Estoy buscando negocios hoteleros, venta y compra de inmuebles, construcción... No me quieren dejar ganarme la vida ni en el fútbol ni en ningún otro sitio", ha lamentado.

Además, el granadino asegura que jamás ha tenido cuentas fuera de España (salvo las de República Dominicana, abiertas tras su expulsión de la Federación) y que siempre ha tributado en su país: "He sufrido un apaleamiento mediático tan grande que era imposible trabajar en España. Tengo cuentas aquí, nada más, y he tributado siempre en España. No voy a desvincularme de mi país, aquí están mis hijas, mi familia, y siempre volveré".