Televisión

Por qué Telepasión no funciona como antes aunque no esté mal hecho y Patricia Conde baile muy bien

    Patricia Conde y dos compañeros de Telepasión

    Sara Tejada

    Debió de ser Javier Caballé, histórico director de Programas y de Entretenimiento en TVE, quien hacia 1990 creó en la Corporación Pública, presidida entonces por Jordi García Candau, el invento de sacar de sus casillas a las grandes estrellas de la que por entonces era la única cadena o al menos la más vista. Sacar de sus casillas era poner a hacer cosas inhabituales, como cantar y bailar en lugar de presentar, a Julia Otero, al hombre o la mujer del tiempo, o a otros personajes de la cadena. Pero por entonces eran tan conocidos, por las audiencias que marcaban, que chocaba verles en esos menesteres con vestuarios y coreografías que sorprendían.

    En 2023, quedan pocas caras reconocibles en TVE. Y, de las que permanecen, muchas no estuvieron este domingo de Nochebuena. Por eso, salvo para un grupo de fieles espectadores de la novela La Promesa, y pocos más, vimos a gente que la mayoría no conocía. Y ése era el eje vertebrados de este invento navideño para la televisión. En años recientes, TVE tuvo que importar a caras que no eran suyas, como Ana Obregón, ahora desnortada tras ser madre por gestación subrogada y no para de despreciar la política de este Gobierno.

    Por razones que desconocemos, faltó Ramón García, que sí es emblema de TVE, y estará en las Campanadas. Tampoco acudió a la llamada uno de los más famosos rostros, aún hoy, en TVE, el cocinero de Masterchef Jordi Cruz. Menos mal que sí estuvieron Pepe Rodríguez y Samantha Vallejo-Nágera.

    Estaba Anne Igartiburu o una importada Patricia Conde, contratada por la productora encargada de sacar adelante el espacio (Europroducciones, del histórico Carlo Bosserman, los de Gran Prix). La ex de Sé lo que hicisteis estaba monísima disfrazada del musical Chicago y bailando las versiones de la fabulosa música de John Kander y Bob Fosse. 

    "Nadie es perfecto", la frase del final de Con Faldas y a lo loco, fue el título escogido para la gala de este año que contó con la citada Patricia Conde y otros presentadores desconocidos para la inmensa mayoría (Rodrigo Vázquez y Aitor Albizua). Por fortuna, tuvimos el placer de contar con gente 'marca de la casa' y muy conocida, como la citada Igartiburu, Jordi Hurtado (Saber y ganar), Jaime Cantizano (Mañaneros), Inés Ballester (Cine de Barrio), Jacob Petrus (Aquí la Tierra) o Cayetana Guillén Cuervo (Versión española) o Elena Sánchez (Días de cine).

    La estrella fue como decíamos Patricia Conde, trasunto de aquella extraordinaria Catherine Zeta-Jones que fascinó con su All That Jazz en la adaptación para el cine dirigida por Rob Marshall en 2002, junto a Renée Zellweger y Richard Gere. Los actores y actrices de las series 4 estrellas y La Promesa. se esforzaron por hacerlo bien, y lo consiguieron. Pena que mucha gente no sepa quiénes son; aun así, funcionó su versión de  'Yo quiero bailar toda la noche'. Sí nos sonaban la vaquilla del Grand Prix (el especial lo producen quienes lo hacen) o temas como 'Nochentera' de Vicco.

    Fue oportuno el homenaje a Nino Bravo en el 50º aniversario de su muerte, con la irrepetible versión de Libre como himno de la noche. Lástima que fuera interpretada por gente de un programa que no ve la gran mayoría de los 47 millones de españoles, como El Conquistador (Julian Iantzi, Joana, Cesc y Patxi).