Zara vuelve a arrasar con una de sus 'clonaciones': el vestido que llevó la Princesa de Mónaco en 1973

Zara, el buque insignia de Inditex, es experta en reversionar prendas icónicas y convertirlas en top ventas. Su capacidad para aunar tendencias y economía es conocida por todos y precisamente eso es lo que le hace alzarse como la favorita por excelencia de la cadena gallega.

Entre las emulaciones más famosas de los últimos años de la firma de Amacio Ortega, destaca las sandalias planas negras con hebilla dorada que versionan a las Dior, pero con una gran diferencia: unas cuestan 690 euros y otras solo 29,95 euros. También, el vestido con estampado floral de la marca Sea (de 695 euros), que arrasó en Instagram, con el que Zara contraatacó con uno muy similar pero con mejor precio: 39,95 euros. Y así, con numerosos casos.

Si algo es evidente es que las grandes cadenas textiles encuentran inspiración en las firmas de lujo para, después, ofrecer al público de a pie una versión accesible y económica de las mismas. Un hecho que consigue facilitar la vida a la mayoría de mortales pero que les ha costado alguna que otra denuncia.

Como era de esperar, con el comienzo del verano a la vuelta de la esquina la más grande Inditex ha vuelto a acertar con una imitación poco esperada: un vestido de flores que Carolina de Mónaco llevó en 1973.

La Princesa de Mónaco eligió este diseño para acudir a un baile de la Cruz Roja que se celebró en Montecarlo en 1973. Carolina, acompañada de sus padres, Raniero III y Grace Kelly, lució un llamativo vestido maxi con estampado de flores, de cuello halter y tonalidades azules, blancas, naranjas, verdes y rosas. El vestido se ajustaba a la cintura y dejaba caer una falda vaporosa hasta los pies.

Simulando este icónico look, Zara lanza un vestido 'especial edicion' con características muy similares pero adaptándolo a las tendencias de la temporada: largo maxi, cuello redondo, estampando floral llamativo y tonalidades vibrantes.

Una pieza que promete convertirse en un must para el verano porque, además de recordarnos al look de la joven Carolina, es fresquito, cómodo y muy favorecedor.