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Ana Peleteiro responde a las críticas tras la pérdida de su segundo bebé: "No estoy feliz, estoy sanando"


Informalia

Están siendo unos días especialmente difíciles para Ana Peleteiro (29) y su pareja, el atleta francés Benjamín Compaoré (37). Este pasado jueves, la medallista olímpica anunció que habían perdido al bebé que estaban esperando, tan solo tres semanas después de compartir la noticia de que ampliarían la familia. Un duro golpe que dinamitó la ilusión con la que ambos vivían esta nueva etapa. Con el paso de los días, la gallega ha comenzado a recomponerse poco a poco y ha compartido una reflexión sobre el duelo que está atravesando tras su reciente aborto.

"Sanar no significa olvidar. Significa recordar sin que duela", ha comenzado escribiendo este domingo en sus redes. Ana ya contó que este bebé no fue buscado, no obstante, fue una sorpresa que le cambió por completo sus prioridades, e incluso desplazó su objetivo de competir en el mundial de Tokio en septiembre. "Muchas veces, cuando atravesamos una pérdida, sentimos que para seguir adelante debemos soltar por completo. Que sanar es borrar, cerrar, dejar atrás. Pero la verdad es que el amor que sentimos por lo que se fue no desaparece; simplemente cambia de forma", ha reflexionado.

Y ha continuado: "Sanar no es negar lo vivido, ni silenciar el dolor. Es permitirnos sentirlo con honestidad y, con el tiempo, dejar que se suavice. Que se vuelva parte de nosotras, sin apretarnos el pecho cada vez que lo recordamos".

Ana Peleteiro y Benjamín Compaoré

En su mensaje, reitera el poder de la sanación para abrirse a una nueva etapa. "Cuando puedes hablar de lo perdido sin quebrarte. Cuando el silencio ya no pesa tanto. Cuando recuerdas, y en lugar de llorar, agradeces", detalla. "No hay traición en seguir adelante. No hay olvido en volver a sonreír. Honras lo que fue, no aferrándote al sufrimiento, sino permitiéndote vivir con todo lo que esa experiencia dejó en ti: su huella, su enseñanza, su amor", concluye en su reflexión.

La atleta también ha compartido un vídeo mostrando su lado más vulnerable, completamente destrozada, reflejando el delicado momento personal que está atravesando. Además, ha lanzado un mensaje a quienes han juzgado cómo ha afrontado la noticia: "No estoy feliz, estoy sanando. Aceptando y enseñando a mi hija que, aunque la vida golpee fuerte, siempre vuelve a salir el sol, y que ahora tiene un hermanito en el cielo que la cuidará", ha señalado.