Tana Rivera recoge el testigo de su abuela, Cayetana de Alba, y entra en la peña taurina 'Las majas de Goya'

Cayetana Rivera, más conocida entre sus amistades como Tana, se ha convertido por derecho en miembro de la peña taurina de mujeres 'Las majas de Goya', en un acto que se celebró en el Hotel Wellington de Madrid. Vestida con un diseño propio de la firma de moda que acaba de lanzar (llevó la misma falda que su madre, Eugenia Martínez de Irujo, días atrás en una boda), Tana estaba encantada con recoger el testigo de su abuela, la inolvidable duquesa de Alba, y formar parte de esta peña que nació en el año 2002 y hoy cuenta con 50 mujeres.

Junto a ella, otro grupo de jóvenes aficionadas a los toros engrosaron la lista de esta peña, que tuvo como madrina de ceremonia a la torero Olga Casado, que está a punto de comenzar su nueva temporada. "Me conformo con hacerlo la mitad de bien que mi abuela Cayetana", declaró Tana, quien estaba radiante y feliz de poder seguir los pasos de su abuela materna. Aunque se esperaba que en esta ceremonia la iba acompañar su madre junto a su marido Narcís Rebollo, al final la duquesa de Montoro no pudo acudir por encontrarse indispuesta, como tampoco estuvo su padre, Francisco Rivera, que permanece en Sevilla acompañando a su mujer, Lourdes Montes, y al bebé que acaban de tener.

Una de las mejores noticias de la velada fue la reaparición de María Ángeles Sanz, que llevaba cuatro meses fuera del circuito, tras sufrir una caída en plena calle por la que tuvo que ser ingresada y operada de urgencia. "Ha sido horrible. No te puedes imaginar el susto tan enorme que se llevó mi hija Marian que salía conmigo en ese momento de casa. No recuerdo cómo me caí, pero la brecha fue enorme y tuvieron que operarme. Lo peor ha sido estar tantos días en el hospital, aunque estoy muy agradecida a todos los sanitarios del hospital la Princesa donde me atendieron fenomenal. Ya he vuelto a mi vida normal, pero es verdad que no me gusta salir sola a la calle. Prefiero ir acompañada porque me siento más segura", confesó María Ángeles, que estaba muy emocionada de reencontrarse con tantas buenas amigas.

Entre ellas, y siempre reconociendo su labor en la peña, estuvo María Tejerina López, que actuó como maestra de ceremonias y es una de las piezas fundamentales para que esta peña no solo perviva, sino que vaya a más. Después de la ceremonia y como era de esperar hubo cóctel y flamenco, que para algo estamos casi en feria.

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