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El retrato oficial de Melania que eclipsa a Donald Trump: traje masculino y mirada de hielo
- Comienza una nueva etapa en la Casa Blanca
- El Ala Oeste de Melania Trump: los enigmas que esconde la Primera Dama marmólea que duerme de nuevo en La Casa Blanca
Pilar Fernández
La Casa Blanca ha publicado el primer retrato oficial de la Primera Dama. Tras la investidura de Donald Trump el pasado 20 de enero, tanto el presidente como su esposa han tomado las riendas de sus respectivos despachos y comienzan esta segunda etapa de liderazgo con puño de hierro. La imagen de Melania ha sido tomada por la fotógrafa belga Regine Mahaux, que ya la inmortalizó entre 2017 y 2021. El mensaje que traslada es bien claro: la mujer que ha regresado no es la misma que se marchó.
Entonces, la figura de la Primera Dama quedaba relegada a un segundo plano, eclipsada entonces por las polémicas y decisiones de su marido. Una 'mujer florero' que vivía sumisa, obediente y encorsetada y que ahora parece dispuesta a cambiar su imagen y también su propia historia con una agenda propia llena de proyectos que gestiona su propio gabinete y su propio equipo. "Ha estado estudiando asuntos exteriores, preparándose por su cuenta y uniéndose a su marido para cenas con personalidades en su club Mar-a-Lago en Palm Beach", dicen en CNN. "Está claro que tiene una confianza que no necesariamente vimos la primera vez. Entiende no solo lo que está en juego para esta administración, sino lo que está en juego para ella".
Y eso es lo que ha querido reflejar Mahaux en su nuevo retrato: una mujer fuerte, confiada y segura de sí misma. Una mujer vestida de 'hombre', con un traje satinado en negro, de chaqueta entallada y pantalón fajín con camisa blanca desabotonada, una mezcla de poder y cercanía desde la elegancia y la sofisticación. Su melena suelta, libre, pero perfectamente diseñada para enmarcar un rostro limpio, de facciones perfectas y mirada felina, astuta, decidida.
El entorno no está elegido al azar: Melania posa desde un despacho, probablemente el suyo, de líneas minimalistas y un gran ventanal con vistas al Obelisco, el Monumento a Washington. Desde aquí, planea relanzar Be Best, una plataforma para la protección de los menores en redes sociales y salud mental que no terminó de despegar en su primera oportunidad: "La gente no me entendía la primera vez. No tuve mucho apoyo", dijo hace pocas semanas en Fox News. "Quizás algunas personas me ven simplemente como la esposa del presidente, pero soy independiente y me valgo por mí misma. Tengo mis propios pensamientos, mis propios sí y no. No siempre estoy de acuerdo con lo que mi esposo dice o hace, y eso está bien". Ahora, pisa sobre seguro: "Sé a dónde voy. Conozco las habitaciones, el proceso. La primera vez fue un desafío porque no teníamos mucha información. Esta vez, todo está mucho más claro".