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El suceso que han sufrido Marisa Martín-Blázquez y Antonio Montero en su casa: el susto de su vida
Sara Tejada
Se han llevado el susto de su vida. Cuando Marisa Martin-Blázquez y Antonio Montero llegaron un día de Navidad a su casa, situada en Torrelodones, a las afueras de Madrid, no daban crédito. Alguien había entrado a robarles aprovechando que no estaban en el domicilio. Encontraron todo revuelto; armarios abiertos, cosas por el suelo: alguien había entrado en su domicilio y lo había revuelto todo.
El disgusto fue tremendo. Inmediatamente llamaron a la Guardia Civil del pueblo, que se hizo cargo de la situación. Tomaron fotos, huellas y pusieron la correspondiente denuncia.
La vivienda de Marisa y Antonio es una bonita casa de campo con jardín y piscina. Está situada a las afueras de Madrid, en la sierra, donde antes vivían grandes nombres de la música como Rocío Dúrcal. De hecho, Marisa siempre ha contado que eran vecinos. Y es allí donde el matrimonio reside durante muchos años, junto a sus dos hijos: Nicolás y Marieta, que ya son mayores de edad.
Según nos cuentan, a pesar del susto, los periodistas se encuentran bien: "No tienen miedo. Ninguno de los dos lo tiene", nos aclara el entorno de ambos. "A Marisa no le cuesta estar sola, solo fue la impresión inicial. No tiene miedo ninguno", nos insisten.
Marisa y Antonio llevan toda la vida juntos. Según han contado ellos mismos se conocieron en la Universidad, se casaron en 1989 y desde entonces, salvo unos años que decidieron separarse, en 2015, han estado muy unidos. "Mi mujer para mí es todo. Es la mujer de mi vida, mi familia, mi amiga, es todo... No le gusta que hable de ella, la vida es larga y pasan muchas cosas, yo a veces soy un poco trasto", dijo el paparazzi en una entrevista. Marisa, más discreta, ha hablado menos pero lo cierto es que sólo hace falta verles juntos para saber que todo aquello está olvidado y que ahora pasan este bache más juntos que nunca.