Bikini, puestas de sol y mucho tonteo: Esther Doña se va de vacaciones con su novio empresario

Esther Doña se refugia estos días en las islas Seychelles, un paraíso que la mantiene ajena al mal clima que estas semanas acecha nuestro país. La ex de Santiago Pedraz pasa un periodo de desconexión junto a su novio Joao, con quien ha recuperado la ilusión en el amor tras el batacazo con el juez. Solo hay que observar las últimas fotografías que ha publicado en Instagram la que fuera mujer de Carlos Falcó.

"Y lo volviste a hacer". Con estas palabras se ha dirigido Doña al empresario colombiano, el protagonista de algunas de las instantáneas que ha publicado de sus vacaciones. En ellas, ambos aparecen en la playa, vestidos con ropa de baño y muy sonrientes dejando a su espalda preciosas puestas de sol.

Eso sí, este no es el único post que ha compartido con Joao. En anteriores publicaciones aparecen juntos en distintos puntos de Portugal y España, pues él reside en Lisboa y ella en Madrid. "Estamos fenomenal. Hemos pasado un verano muy bonito. Joao es fantástico", contaba Doña a la prensa el pasado 14 de septiembre, cuando presentó en sociedad a su chico en un evento en Sevilla.

El empresario, padre de dos hijos, la acompañó entonces a la entrega de los Premios Escaparate. Era su primera aparición pública y el portugués no se separó de ella en ningún momento. "¿Quién me lo iba a decir?", dijo ella a los periodistas, pues el pasado mes de mayo aseguró que no iba a volver a enamorarse al no confiar "en los hombres".

Doña anunció su boda con Pedraz en el verano de 2020, pero no llegaron a pasar por el altar. Esther se declaró muy desilusionada, pero ahora vuelve a sonreír. Por su parte, el magistrado ha rehecho su vida con la abogada Elena Hormigos, con la que se ha casado y ha tenido un hijo, Jacobo, que es el primero para ella y el cuarto para él.

Antes de su historia con Pedraz, Esther Doña estuvo casada con el fallecido marqués de Griñón, padre de Tamara Falcó. El aristócrata y ella se conocieron en Málaga, en septiembre de 2015, en una presentación con el distribuidor de sus vinos en la zona. En la cena él le pasó una tarjeta con su móvil y otra en blanco para que ella le apuntara el suyo.

Ahí comenzó un romance que acabó en boda y que dio mucho que hablar por la diferencia de edad. Se llevaban 41 años. Él falleció de Covid durante la pandemia. Esther se quedó destrozada pero poco tiempo después se volvió a enamorar de un conocido del marqués, el juez Santiago Pedraz, tal y como descubrimos y contamos en primicia desde Informalia el 30 de julio de 2021. Un verano después, todo acabó como el rosario de la aurora.