Ya hay 37 denunciantes de Mohamed Al-Fayed, 'suegro' de Diana de Gales: "El depredador sexual" que pedía citologías
- Las empleadas no denunciaron entonces por miedo a represalias. Sin embargo, era un secreto a voces
- Mohamed Al-Fayed, el difunto dueño de Harrods y padre del amante que murió junto a Lady Di, acusado de violar a cinco de sus empleadas
Informalia
37 son las mujeres que ha denunciado haber sido víctimas de agresiones sexuales por parte del magnate ya fallecido Mohamed Al-Fayed, dueño de los almacenes Harrods de Londres. Las denunciantes han dejado sus testimonios en un reportaje de la BBC, que llega un año después de la muerte del 'suegro' de Diana de Gales. Su hijo, Dodi Al-Fayed, y la princesa, fallecieron en un terrible accidente de coche en París en 1997.
Por goteo se van conociendo más detalles de estos escabrosos y vejatorios episodios que refieren las empleadas de Harrods cuando el empresario egipcio era era el todopoderoso propietario de la empresa.
En una rueda de prensa a la que han acudido 20 de las denunciantes, han salido a luz palabras como "depredador sexual" y hombre "sin moral". Las empleadas no denunciaron entonces por miedo a represalias. Sin embargo, era un secreto a voces. Ahora les ha llegado su momento y 14 de ellas ha presentado demandas civiles contra los actuales propietarios de los emblemáticos Harrods.
Entre los testimonios, tal y como han informado en TardeAR, las supuestas víctimas han relatado que eran sometidas a chequeos médicos por la propia empresa, incluidas citologías. También, tests para comprobar si padecían alguna enfermedad de transmisión sexual. Y esos análisis eran reportados a Mohamed con el objeto de saber "si esas chicas eran chicas puras", han comentado en el programa citando las intervenciones de las ex empleadas. Mohamed Al-Fayed, millonario empresario egipcio, también era el propietario del Hotel Ritz de París. Este episodio ha caíado como una bomba de racimo en la reputación del establecimiento. Desde los grandes almacenes se han apresurado a desmentirlo todo y hacer un lavado de imagen.