Toño Sanchís reaparece, asegura que no para de trabajar y Belén Esteban se lo deja claro: "Ahorra para cuando me tengas que pagar"

Belén Esteban ni olvida ni perdona. Tanto es así que para 2025 tiene pendiente el juicio por lo penal contra Toño Sanchís tras casi una década de litigio. La guerra contra su exrepresentante está lejos de apaciguarse y este lunes, 16 de septiembre, la de Paracuellos se ha vuelto a pronunciar al respecto y ha recordado que Sanchís todavía le debe más de 400.000 euros.

La madre de Andrea Janeiro ha hablado del tema después de que su compañero Víctor Sandoval se desplazase hasta la Mercedes-Benz Fashion Week Madrid para hablar con el representante, invitado a un desfile junto al periodista, y amigo suyo, Cristobal Soria. "Nos han dicho, los dos, que están en su mejor momento, que no dejan de trabajar y que están sin parar. Tanto de trabajar como a nivel personal. En el mejor momento de toda su vida", ha explicado Sandoval en Ni que fuéramos Shhh.

Belén, al respecto, ha respirado y lejos de enfadarse, ha dicho tranquila pero a sabiendas de lo que decía: "Yo sí voy a decir una cosa. De Cristobal no tengo nada que decir, pero a Toño le digo que me alegro mucho de que esté trabajando porque en 2025 tiene el juicio por lo penal. Llevo casi seis años esperando este juicio", ha recordado.

En este sentido, ha explicado contundente: "Me alegro de que estés trabajando tanto para pagarme los 460.000 euros que me debes más las costas y los intereses. Entonces estoy muy contenta de que trabajes. Lo único que espero es que, como todo está grabado, que todo lo que trabajas lo estés facturando y no factures supuestamente a través de otras personas. A mí para el juicio me viene muy bien porque se puede demostrar que tienes dinero. Entonces, yo te juro que me alegro que estés trabajando. Ahorra para cuando me tengas que pagar", ha sentenciado.

Belén rompió con su representante en 2015 tras casi una década contando con sus servicios. A lo largo de estos años han protagonizado guerras judiciales y mediáticas que siguen abiertas a día de hoy. Incluso Belén se quedó con su casa tras salir a subasta. Una vivienda que al final le trajo más quebraderos de cabeza que otra cosa debido a todo el dinero que tuvo que invertir en ella, pero que le sirvió en cierto modo de venganza.