Isabel Pantoja reaparece en Zaragoza tras sus problemas de salud y se encomienda a la Virgen del Pilar

Recuperada de sus problemas de salud y dispuesta a saborear de nuevo el éxito con su concierto en Zaragoza este sábado, Isabel Pantoja ya ha aterrizado en la ciudad en un avión privado que salió desde Jerez de la Frontera. Aterrizó con una sonrisa de oreja a oreja, ajena a la mala noticia que se publicaba solo unas horas antes: la cancelación de tres de sus conciertos en España por un "enfrentamiento entre las empresas promotoras".

La tonadillera ha llegado feliz a la ciudad aragonesa, donde le esperaba una sorpresa: la visita de su íntima amiga Mariló de la Rubia. Acto seguido, la madre de Kiko Rivera ha visitado a la Virgen del Pilar, tal y como compartía ella misma con un vídeo a través de sus redes sociales: "Hola, amigos, a todos mis fans de Zaragoza. Acabo de ver a la Virgen del Pilar porque la llevo siempre en mi corazón y estoy súper feliz porque ya estoy aquí. Ya la he visto a ella y ahora vengo a cantaros. El sábado estaré con vosotros. Os espero a todos, un beso", decía a las puertas de la basílica. Vestida con un chándal personalizado (con letras IP metalizadas en la chaqueta) y camiseta de Guess, Pantoja parece ligeramente más delgada tras superar los problemas de salud que la obligaron a cancelar su concierto en Tenerife.

Esta gira por sus 50 años en la industria musical prometía muchas alegrías para Pantoja, pues al caluroso apoyo de su público se sumaban los beneficios económicos que obtiene de cada concierto, que le sirven para aliviar la deuda millonaria que arrastra desde hace años. Sin embargo, los continuos contratiempos amenazan la sonrisa a la cantante de Marinero de Luces, como la última disputa entre las empresas promotoras de la artista, que este jueves anunciaban la cancelación de tres de sus citas: "Estimados seguidores, lamentamos profundamente que debido a desacuerdos entre las empresas de la gira '50 aniversario de Isabel Pantoja' no será posible la realización de los conciertos previstos en Nerja, Sotogrande, Córdoba", rezaba el escrito.