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Tita Cervera, reina por un día: olvida los desprecios de Borja y posa con su 'heredera' en su noche más especial


Pilar Fernández

Pletórica. Así ha llegado la baronesa Thyssen a la gala Women in Art 2024, donde ha recibido el premio por su trayectoria vital y profesional en apoyo al mundo del arte. Con un diseño negro abullonado, torerita de gasa y flor XXL en el escote, la coleccionista ha deslumbrado en el photocall y no precisamente por el despampanante collar de diamantes y rubíes que ha lucido sino por la persona que le acompañaba, por primera vez, en una gala de estas características: su hija Carmen, destinada a continuar con el legado de su madre.

Y es que nada mejor que un homenaje a Tita para comprobar, de primera mano, la importancia de su figura y su labor en el panorama artístico internacional. El Museo Thyssen ha sido el escenario para la velada, que ha contado con importantes rostros del mundo de la empresa, la música o el diseño. Carmen Lomana, Luz Casal o Nieves Álvarez han querido rendir homenaje a Tita en una gala organizada por la revista Harper's BAZAAR y en la que han repasado "el inmenso legado de la mujer que trajo a España la colección de arte privada más importante del mundo".

Pero, como decíamos, la invitada más importante de la noche ha sido su propia hija, Carmen. La joven, de 17 años (cumple 18 en julio), que lucía un vestido de satén en verde botella con falda midi en tubo, corpiño drapeado y gran lazada en la cintura, seguirá los pasos de su madre en el mundo de arte, tal y como confesó la propia baronesa hace unos meses. Estudiosa, muy inteligente y muy sensata, Carmen es melliza de Sabina, la otra hija de Tita, que ha volcado su talento en otros menesteres: toca el piano, canta en tono soprano y escribe cuentos, además de ilustrarlos. Es, además, la más tímida, por lo que son muy pocas las ocasiones en las que se deja ver en público.

Ambas nacieron el 6 de julio de 2006 por gestación subrogada y Tita ha ejercido de padre y madre para ellas pues su hermano Borja se casó con Blanca Cuesta y formó su propia familia solo un año después. Los desencuentros entre madre e hijo han afectado a la relación entre los hermanos, que no se ven muy a menudo. De hecho, ni siquiera han acudido este lunes al homenaje de Tita en Madrid.

Las niñas hablan varios idiomas y estudian en un colegio internacional. Tras estudiar posibilidades (Harvard, entre otras), todo apunta a que Carmen iniciará sus estudios universitarios de ADE y Relaciones Internacionales en una de las escuelas de negocios más prestigiosas de Madrid. "Una colección internacional exige una gestión similar a la de una gran empresa", dijo su madre.