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El momento más duro de Shannen Doherty en su tratamiento contra el cáncer: "Fue traumático"


Informalia

Shannen Doherty sabe que su enfermedad avanza en contra de su voluntad. Sin embargo, en lugar de recluirse y enfrentarla en la intimidad, habla de ella sin tapujos para quien la quiera escuchar. Lo hace en Let's Be Clear, el podcast que lanzó el pasado año para abordar los asuntos referentes al cáncer de mama que padece a sus 52 años, el cual está en fase avanzada.

La actriz de Embrujadas contó este martes a la modelo Anne Marie Kortright nuevos detalles sobre su tratamiento, durante el que, a causa de la quimioterapia, perdió el cabello. "El afeitado de la cabeza fue extremadamente fundamental y traumático", explicó.

"Recuerdo que publiqué una foto en mi Instagram hace un tiempo, cuando estaba saliendo de la ducha con mechones y mechones de cabello agarrados", dijo Doherty. Fue entonces cuando decidió raparse. "Tenía que hacer algo al respecto porque no se lo había dicho a nadie, ni al mundo, ni a los medios", se sinceró.

En ese momento, la artista "todavía estaba aceptando" los efectos que el cáncer estaba dejando en ella. "Pero sabía que alguien iba a sacarme una foto poco favorecedora con el cabello cayéndose y supe que tenía que tomar el control como si fuera mi propia narrativa", apuntó la actriz. Curiosamente, fue su acompañante en el podcast, su amiga Anne Marie, la que le pidió que le rapara. "No tenía idea de lo que estaba haciendo", explicó su compañera en el programa.

Los vetados en su funeral

Hace unos días Doherty hablaba sin filtros sobre los invitados que quería en su funeral. Lo hizo con uno de sus mejores amigos, Chris Cotazzo, al que pidió que fuera el albacea de su testamento. "Hay gente que creo que se presentarían y que no quiero allí", valoró la artista.

"No los quiero allí, porque sus razones para presentarse no son las mejores", opinó, admitiendo que, aunque estas personas tendrían "sus razones" para acudir, estas no serían suficientes: "No les gusto lo suficiente como para asistir a mi funeral. Pero lo harán porque es lo políticamente correcto y no quieren quedar mal".

La intérprete de Sensación de vivir desea que su entierro sea "una fiesta del amor". No quiere "que la gente llore" ni que haya allí personas hipócritas. Según la actriz, hay quienes acudirían al funeral y después, en privado, dirían frases como "gracias a Dios esta perra ya está muerta". Por ello, Cotazzo le pidió una lista con los vetados al funeral. "No puedo darte una lista de quién no quiero porque es demasiado larga", respondió ella con sorna. "Aborrezco la falsedad y no soporto a las personas que fingen que encontraron a Jesús y afirman estar muy arrepentidos de cualquier cosa mala que hayan dicho sobre ti", sentenció.

La actriz lleva ocho años luchando contra un cáncer de mamá que, en 2020, evolucionó al máximo nivel de gravedad. Tras recibir el diagnóstico se sometió a una operación que coincidió con su divorcio del fotógrafo Kurt Iswarienko, con el que llevaba diez años de relación.