Silvia Bronchalo presentó dos denuncias por presuntos malos tratos contra Rodolfo Sancho hace años pero las retiró

Nuevos detalles sobre la denuncia que Silvia Bronchalo ha presentado en la comisaría de Alcobendas contra Rodolfo Sancho. La más sorprendente de todas es que no es la primera vez que la empresaria acusa al padre de su hijo de malos tratos psicológicos: lo hizo en otras dos ocasiones hace años, antes de la detención de su hijo en Tailandia. Sin embargo, las retiró: "Entendió que en ese momento era lo más correcto por una serie de circunstancias", ha dicho en De Viernes su abogada.

Carolina Castro ha confirmado la información, adelantada por Nacho Abad: "Eran denuncias anteriores a la detención de su hijo pero posteriores a su relación sentimental. Es decir, no estaban juntos", ha aclarado. "El paso que ha dado le ha costado muchísimo", ha dicho.

Esta información se suma a un nuevo y sorprendente dato: Silvia y Daniel no tienen relación en estos momentos. La última vez que hablaron madre e hijo fue el pasado 10 de enero. En la denuncia, Bronchalo también acusa a Rodolfo de interferir hasta romper la relación materno-filial y asegura que ha renunciado a la orden de alejamiento y a la prohición de comunicación que le han ofrecido como medidas de protección porque su ex marido es el único puente entre su hijo y ella en estos momentos.

Castro afirma que su cliente "está desbordada y muy disgustada" por el hecho de que esta denuncia haya visto la luz: "Nosotros no lo hemos filtrado, la otra parte no tiene todavía notificación así que entendemos que la filtración viene por otra parte", afirma en su tercera intervención televisiva del día, autorizadas todas ellas por Silvia Bronchalo.

Los datos de la denuncia

Según la declaración de Silvia Bronchalo, los mensajes despectivos que recibe por parte de Rodolfo Sancho son "constantes" y aporta pruebas de algunos de ellos en los que puede leerse "Pirada", "Eres bipolar", "Eres incapaz" o "Has causado traumas a tu hijo".

Castro afirma que las conversaciones entre Silvia y Rodolfo se reducen a los temas relacionados con su hijo y Abad asegura que las discrepancias entre ellos surgieron por un tema económico: "Garantizar la supervivencia de Daniel en la prisión de Tailandia supone entre 200.000 y 300.000 euros al año. Ese dinero, con los honorarios de los abogados españoles, ha sido un punto de conflicto".