Cristina Pedroche, preocupada por su matrimonio con Dabiz Muñoz: "Hay que acostumbrarse a ser tres"

Forman uno de los matrimonios más queridos y consolidados del panorama nacional y desde el pasado mes de julio son tres en casa. El nacimiento de la pequeña Laia lo ha cambiado todo y ambos luchan por mantener su relación intacta: dedicándose tiempo a ellos mismos y cultivando su amor para que siga floreciendo.

Cristina Pedroche, que volverá a dar las Campanadas este fin de año, ha sido entrevistada por Joaquín Sánchez y en el programa de Antena 3, que se emite este jueves, habla largo y tendido de su nueva vida como madre primeriza: "Cada día es una oportunidad nueva para disfrutar y ser feliz y me lo está enseñando mi hija ahora. Y con Dabiz igual, antes éramos dos y ahora somos tres".

De esta forma, han tenido que volver a encajar los piezas de su vida para que todo funcione: "Pues eso, que hay que acostumbrarse de pasar de dos a tres. Estoy cuidando la relación porque tengo presente que antes que madre sigo siendo mujer y profesional. Por eso quise incorporarme cuando la lactancia. Estaba establecida, tenía mi banco de leche en el congelador y estaba todo controlado".

Sobre el postparto, uno de los temas que más ha abordado en sus redes sociales, también se ha vuelto a pronunciar explicando lo difícil que fue para ella: "Me apetecía volver a trabajar porque trabajar también me ayuda psicológicamente a estar bien. He tenido un posparto complicado, he llorado mucho y sigo llorando mucho porque es un duelo de la mujer que yo era a la mujer que soy ahora".

En este sentido, también ha hablado de sus grandes miedos: "Yo pensaba que iba a ser más valiente porque soy echada para delante, pero con la niña me vine abajo y me da miedo todo. Y sigo teniendo muchos medios, me daba miedo meterla en el coche, en el carrito, cambiarle el pañal por si la hacía daño. Y no me gustaba que la cogiera la gente. No quiero que la miren ni que la besen".

Aunque el parto fue bien y la recuperación física también, lo psicológico se mide aparte: "Estoy agradecida a mi cuerpo. El deporte me ha ayudado mucho en todas las épocas de mi vida, pero en el embarazo más. Parto súper bueno, todo natural. En dos semanas me valía la misma ropa pero la cabeza no estaba bien y no sigue bien, estoy con una psicóloga perinatal, haciendo terapia. Porque cada día es un miedo nuevo".

Afortunadamente, el chef Michelín y ella hacen un equipo estupendo: "Siempre intento ir a por el diez. Aunque no haga tan bien las cosas, intento rodearme de profesionales. Aunque luego el camino lo hagamos ella y yo... y Dabiz. Es maravilloso y me apoya en todo. Dabiz me dice 'Relájate, si la niña lo único que quiere es que seas feliz. Si eres feliz la niña va a estar bien. Amor no puedes tener más por esta niña, por mí también'. Yo los amo, la familia que estamos construyendo es preciosa".

Sobre el motivo por el que le pusieron a la pequeña primero su apellido, también ha dicho: "El tema de los apellidos también fue muy polémico, pero que es una ley que no me la he inventado yo. Que puedes elegir el apellido y poner el del padre o la madre antes. Que se llame Laia Pedroche Muñoz es una opción que da el registro. Me gustaba Laia Pedroche, Muñoz hay muchos".

Por otro lado, asegura que están dispuestos a ampliar la familia: "Solo me da miedo el posparto. Ahora que veo un poco ya la luz... Dabiz es el que quiere sí o sí tener más... Bueno, un equipo de fútbol. Pero sí me gustaría tener una hermanita para Laia y tengo pensado el nombre y todo".