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El servicio premium de 500 euros que Tamara Falcó no comparte con su marido: Onieva no es VIP


Informalia

La marquesa de Griñón y su flamante esposo han regresado a España tras su última escapada a Reino Unido. Lo hicieron en el mismo avión pero fue poner un pie en el aeropuerto madrileño y tomar caminos separados. ¿El motivo? El servicio premium que escogió Tamara Falcó y con el que dejó completamente tirado a Iñigo Onieva.

Y es que la hija de Isabel Preysler no viaja como el común de los mortales, sino que contrata el servicio Premium, en el que empleados del aeropuerto se encargan de recoger sus maletas, meterlas en el coche y realizar todas las gestiones pertinentes en su nombre para que ella vaya directa a su coche en terminal privada. Un servicio con el que Tamara paga 500 euros y que, visto lo visto, no comparte con su marido.

Mientras ella recibía atenciones de marquesa, Onieva salía de la terminal por una puerta común y arrastraba sus maletas como el resto de viajeros no aristócratas. No es la primera vez que el matrimonio opta por desembarcar por separado y llama la atención que no lo hagan juntos. "Tienen cuentas separadas y Tamara se lo puede permitir y él no", han asegurado en TardeAr.

El nuevo trabajo de Onieva

Ambos han retomado sus quehaceres diarios tras su última escapada londinense. Tamara atiende sus compromisos publicitarios mientras que Iñigo intenta volver al mercado laboral. El ingeniero, que fue despedido como relaciones públicas el pasado mes de mayo, estudia nuevos proyectos y parece que ha encontrado uno.

No es algo definitivo sino esporádico pero podría reportarle un jugoso cheque, y es que Onieva está actuando como intermediario de una gran empresa para gestionar el alquiler de unas oficinas en el centro de Madrid por 78.000 euros. "Él no lo va a alquilar, ha hecho una visita para un fondo de inversiones. Se llevará una comisión y le pagan por ello", han desvelado.