Mari Ángeles Grajal, "acorralada" tras otra gran "mentira": "Jaime Ostos sigue vivo legalmente"

La guerra entre Mari Ángeles Grajal (69) y los hijos de Jaime Ostos se ha evidenciado en los últimos meses a raíz de los problemas surgidos con la herencia del torero, que falleció el 8 de enero de 2022 a causa de un infarto durante unas vacaciones familiares en Bogotá. Esta guerra por la herencia del torero destapó una mentira que Grajal había mantenido durante los últimos ocho años: nunca se casó por la iglesia con Jaime Ostos.

El encargado de sacarla a la luz fue el propio Jaime Ostos Jr., primogénito del torero y hermano mayor de Jacabo, que aseguró no haber encontrado registros eclesiásticos de un supuesto enlace que su padre y su madrastra anunciaron en el 2015.

El hilo se vuelve a enredar con la nueva información adelantada por Pilar Vidal este viernes: "Jaime Ostos sigue vivo legalmente y Mari Ángeles Grajal no es su vida". La periodista ha asegurado que el fallecimiento del torero, que perdió la vida a los 90 años, "no está certificado".

Vidal ha ido más allá, pues la boda entre el desaparecido torero y la doctora sigue trayendo cola: "No se casaron, Mari Ángeles nos mintió. El otro día ella le desmintió a Paloma García-Pelayo la boda religiosa porque nosotros habíamos solicitado a todas las diócesis que nos hiciesen entrega de ese documento". Entonces, ha contado Vidal en el programa de Sonsoles Ónega, "ella ya se sintió acorralada y no tuvo más remedio que reconocer que no. Pero ahora tendrá que reconocer que la legal, por la vía civil, tampoco". Y ha sentenciado: "Es súper divertido, porque puede haber dos viudas".

Así las cosas, la boda que ahora también se pone en entredicho es la de 1987. En marzo de aquel año, una conocida revista publicó las fotos de la supuesta boda civil entre los dos. Sin embargo, este enlace tampoco se habría efectuado legalmente, según la información adelantada por Pilar Vidal.

Su matrimonio se vio salpicado por varios escándalos. Tal y como informa el diario ABC este sábado, el detonante fue Aurora Díaz, una mujer que aseguró ser la madre de Gisela (fruto de una relación extramatrimonial de Ostos). Posteriormente, la justicia la reconoció como hija de Jaime Ostos y provocó un divorcio con Grajal. 

Mari Ángeles Grajal vs los hijos mayores de su marido 

Jaime Ostos falleció en enero del año pasado, pero su herencia continúa sin repartirse y sus hijos Jaime y Gabriela, fruto de su matrimonio con Consuelo Alcalá, y Gisela, de una relación extramatrimonial con Aurora Díaz, acusan a su 'viuda' de haberse quedado con todo. "Arpía", fue el término que empleó Jaime Ostos Jr. para definirla. 

La guerra se desató a raíz de la venta de la casa de Villaviciosa de Odón, adelantada en primicia por Informalia, en la que vivieron Jaime Ostos y Mari Ángeles Grajal en los últimos años, una transacción por la que la doctora se ha embolsado 650.000 euros. Los hijos mayores del diestro reclaman la legítima, pero Jacobo, su hijo con Grajal, lo ha dejado claro: "La casa está a nombre de mi madre y lo ha estado desde el minuto uno. Lo que gane le corresponde solo a ella". Y ha añadido: "Cuando hay una herencia todos quieren pillar, pero aquí no tienen nada que hacer".

Mientras tanto, la viuda o no viuda de Jaime Ostos se lo pasa muy bien con el empresario José Gandía, que fue amigo del propio Jaime Ostos. Los dos se dejaron ver cómplices en la pasada Feria de Abril de Sevilla. El pasado viernes la doctora y su amigo especial acudían a La Maestranza para disfrutar de la corrida de Morante de la Puebla. Un plan que repetían el domingo, asistiendo al adiós de El Juli a los ruedos en la ciudad andaluza.