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María Teresa no dejó testamento porque "era como llamar a la muerte": la única casa que heredan sus hijas


    Informalia

    Terelu Campos, que pronto comenzará a trabajar en TVE, y Carmen Borrego, que hará lo propio en Telecinco, están desoladas desde la muerte de María Teresa Campos el pasado 5 de septiembre. Ahora, toca afrontar lo más difícil para la vida de cualquier hija, sobrellevar su pérdida, vivir con su recuerdo y tener presentes sus enseres personales. La veterana comunicadora no dejó testamento, aunque las hermanas Campos son las herederas legítimas para repartirse entre ellas la única propiedad que dejó la periodista.

    "Aunque era una mujer muy cabal y le gustaba dejar siempre todo atado y bien atado, Teresa también era muy supersticiosa y por ello, nunca quiso hacer testamento. Le parecía que era como llamar a la muerte y ella decía que llegara cuando tuviera que llegar, pero que no iba a prepararle el camino", cuentan personas de confianza de la familia Campos a Semana. 

    En este sentido, también añaden: "Además, estaba tranquila porque sabía que sus hijas, que era a quienes quería dejar sus bienes, eran sus legítimas herederas". 

    La herencia de María Teresa

    La herencia que deja María Teresa no refleja sus años de gloria en televisión. Fue una mala administradora e inversora, tal y como ella misma reconoció en entrevistas de televisión. Prácticamente todo lo invirtió en su famosa mansión con piscina climatizada de Molino de la Hoz. La casa la puso en venta en 2015 por el gran gasto que le acarreaba. Finalmente la acabó vendiendo en 2021, pero por dos millones de euros menos de lo que pedía inicialmente (de los 4,5 que pedía, se tuvo que conformar con 2,5). 

    Con el fin de solventar sus problemas de liquidez, María Teresa también realizó otra serie de movimientos con sus propiedades. Así las cosas, en 2017 vendió el ático de Aravaca, a las afueras de Madrid, por más de un millón. En 2020 también vendió un piso de 100 metros cuadrados que tenía en el centro de Málaga por 400.000 euros. 

    Tras desprenderse de estas propiedades, la comunicadora tan solo se quedó con otra casa que tenía en Málaga desde 1981. Esta de 200 metros cuadrados con envidiables vistas al mar. Según Semana, la casa podría acarrear todavía una hipoteca. El inmueble está valorado en 900.000 euros.

    Además de esta propiedad malagueña, a Terelu y Carmen también les queda un guardamuebles repleto de preciados enseres personales de su madre, joyas y alguna que otra pieza de arte.