Pedroche habla de su parto sin epidural y desvela lo que hizo con el cordón umbilical: "Ni soy mejor ni peor mujer"
Informalia
Cristina Pedroche dio a luz a su primera hija con Dabiz Muñoz, Laia, el pasado 14 de julio y durante estos días ha dado detalles a sus 3 millones de seguidores de cómo están siendo estas primeras semanas como mamá primeriza. Pese a todo lo que se informó en los meses de embarazo, ya ha comprobado de primera mano lo difícil que es ser madre. "Me salió una grieta en cada teta", confesó sobre el proceso de lactancia.
Este martes 25 de julio, la presentadora de las Campanadas de Antena 3 se ha visto con ánimo para responder a una ronda de preguntas en stories de Instagram. "Sino lo he hecho antes es porque ha sido tan salvaje y bonito que no quería que el odio que sé que vendrá cuando conteste a algunas preguntas me pudiera afectar".
A continuación, ha desvelado cómo fue su parto, "vaginal y natural": "Estaba muy tranquila y no me acordé de la epidural. En el curso de hipnoparto [técnicas de relajación profunda y concentración] me construí mi propia escalera para ir eligiendo una cosa u otra según fuera aumentando la intensidad de las olas uterinas. La epidural estaba en la última de mi lista. No me tuvieron que poner ninguna medicación, ni tuve desgarro, un pequeño punto que ya se ha reabsorbido. La respiración fue mi gran aliada"
También ha descrito el proceso hasta llegar al momento del alumbramiento: "Llevaba una semana y media con dinámica de parto, con pródromos, pero nada de dolor y eso ya me estaba haciendo borrar el cuello del útero y empezar con la dilatación. El día 13 a las 4 de la mañana empezaron las contracciones con intensidad, pero venían cada 6-10 minutos, todavía no eran regulares. Así que estuve en la cama tumbada y concentrada en la respiración cada vez que venía una ola uterina más intensa".
Pese a todo, ha reconocido que el dolor fue inmenso: "Sabía que había mujeres que cuando ya les quedaba muy poco para dar a luz decían: no puedo más, me voy a morir. Y que después incluso algunas no se acordaban de haberlo dicho. Cuando yo dije esa frase fui totalmente consciente de estar diciéndola y aunque el dolor era muy fuerte sonreí porque sabía que ya estaba todo hecho, que en pocos minutos conocería a mi hija".
Tras estar en permanente contacto con la matrona, se metió con la pelota de pilates en la ducha y luego se fue directa a la piscina, donde estuvo todo el día hasta caer la tarde: "Estuve hasta las 20h ahí. El agua me ayudó a sentirme menos pesada y aunque la intensidad era cada vez mayor me ayudaban bastante los masajes con presión en la zona lumbar cuando venía la contracción. Entre una y otra me relajaba muchísimo, incluso pude comer. A las 21h ingresé de casi 5 centímetros y Laia nació a las 00:10 ya el día 14 de julio".
Junto a una foto tomada tres horas después de parir, escribió: "Lo que llevo es un empapador porque en las tres horas posteriores se sangra bastante. A día de hoy ya sangro muy poco, pero hay mujeres que se tiran sangrando toda la cuarentena".
Tras toda esta retahíla, dejó claro que esta es su propia experiencia: "Yo estoy contando mi experiencia que es igual de real y válida que la de otras mujeres. Ni soy mejor mujer por no haberme puesto la epidural o haber tenido parto natural en vez de cesárea. Ni mejor madre por estar queriendo que la lactancia sea un éxito. Pero tampoco peor. Este es mi caso y ya está".
Entre otros datos, también desveló que hizo con el cordón umbilical de su hija: "Hice pinzamiento óptico, es decir, lo cortamos cuando dejó de latir y se quedó totalmente blanco. Fue una de las primeras decisiones que tomé en cuanto empecé a leer sobre embarazo".
Por último, sobre el posparto también ha tenido unas palabras no tan dulces: "Es muy duro. A veces lloro sin saber muy bien el por qué y no me salen las palabras. La lactancia es muy dura y con las grietas lo he pasado muy mal. También he necesitado la ayuda de una psicóloga perinatal que me ha ayudado a entender mejor el proceso y a saber que todo esto es normal y que no estoy sola. No estamos solas".
Cristina Pedroche y Dabiz Muñoz
El chef cuatro estrellas Michelín y la televisiva estaban deseando verle la carita a la pequeña de la casa. Forman una de las parejas más consolidadas desde que se conocieran en octubre de 2014. Se dieron el 'sí, quiero' justo un año después, el 24 de octubre de 2015, en una boda muy íntima (solo asistieron sus padres y el notario) celebrada en el vestidor de su casa.
A finales del año pasado se filtró que estaba embarazada y, tan solo un día antes de salir al balcón de la Puerta del Sol para dar las Campanadas, ellos mismos lo confirmaron a través de las redes sociales.