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Tamara Falcó, pletórica, describe su pedida de mano como "algo increíble y precioso"


    Susana García

    La marquesa de Griñón rebosa amor por todas partes y no nos extraña. Su romance con Íñigo Onieva ya es digno de un guion de telenovela: hay infidelidades, compromisos fallidos, miembros de las familias enemistados, pero el final feliz parece estar más cerca.

    Este sábado, Tamara y el diseñador de coches se reunieron en la gran mansión de Isabel Preysler para sellar su compromiso ante sus familiares y amigos más cercanos con todo el ceremonial que se estila entre las familias con títulos y elevado nivel económico.

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    Como manda la tradición, la novia ofreció una cena a la familia del novio, que no se conocían al completo, y entre los prometidos se intercambiaron regalos. Los típicos detalles en estas celebraciones suelen ser casi siempre un reloj para él, y una joya para ella. Aunque a Tamara no le hacia falta que Iñigo le regalara nada: "Yo estoy encantada con mi anillo"

    La hija de Carlos Falcó se está reservando "para ella" (o para una exclusiva) las fotos del look que escogió para este gran día. Lo único que sabemos, vía Beatriz Cortázar que lo ha desvelado este domingo en Fiesta, es que "iba de lila" y su madre de "azul" con un diseño de la diseñadora colombiana Silvia Tcherassi. Lo curioso es que de lila también iba su suegra, Carolina Molas, la única invitada que se dejó fotografiar antes de la celebración

    Sobre los discursos, que Tamara ya adelantó que habrían, la periodista ha contado: "Los que hablaron fueron el hermano mayor de Tamara, que será su padrino, Manolo Falcó, y por parte de Íñigo, su padre, porque el padre del novio es el que tradicionalmente tiene que hacer la petición". "Después de la cena, que eran solo 26 comensales, hubo una fiesta con más amigos y hubo baile con una banda de música, que le regaló su primo Álvaro Castillejo", añadió Cortázar. En definitiva, Tamara resume su pedida de mano "como algo increíble y precioso". Si todo marcha así de bien, le dará el 'sí, quiero' a Íñigo el próximo 8 de julio.