La novia de Urdangarin, de los nervios: los hijos de Iñaki no quieren conocerla y la infanta Cristina los protege con una cláusula

Las cosas están tensas en la casa del ex duque de Palma y no es para menos: un año después de iniciar su relación con Ainhoa Armentia, los hijos de Iñaki Urdangarin continúan dando la espalda a la novia de su padre. Si bien en un principio la pareja comprendía que la situación era complicada y que Juan, Pablo, Miguel e Irene necesitaban tiempo para adaptarse, ahora comienzan a desesperarse. La actitud de la infanta Cristina tampoco ayuda.

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Y es que la hija el emérito incluyó una cláusula en el acuerdo de divorcio donde especificaba que sus hijos no tendrían relación alguna con Ainhoa de manera pública, algo que ellos, por lealtad a su madre o por deseo propio, han hecho extensible también al ámbito privado. De hecho, ninguno de los cuatro ha regresado a Vitoria desde que sus padres se separaran. Una actitud muy diferente a la de los hijos de la propia Armentia (dos adolescentes) que, según El Nacional Cat, ya conocen a Urdangarin.

Con el divorcio a la vuelta de la esquina (se firmará en junio), Urdangarin y su novia tienen vía libre para comenzar una nueva vida y vivir juntos, un deseo que comparten desde hace tiempo. Sin embargo, el rechazo de Juan, Pablo, Miguel e Irene hacia la abogada es un obstáculo para la pareja, que sueña con comidas familiares, cumpleaños y escapadas de ocho.

Las últimas provocaciones de Iñaki han empeorado las cosas. Ni la infanta ni sus hijos entienden el regreso de Urdangarin a los refugios vacacionales de la familia real (Baqueira y Mallorca) en compañía de Ainhoa. Cristina está dolida y sus hijos han hecho piña con ella.