Lequio cree que su nieta no lleva su apellido y define así su relación con Ana Obregón: "No hay nada"

"Que mi hijo sea una vez más protagonista de la actualidad me produce rabia", ha dicho Alessandro Lequio este lunes en su regreso a El Programa de Ana Rosa. Sus palabras le separan de la actitud de la madre-abuela Ana Obregón porque el italiano describe lo que esta ocurriendo como "una situación tremendamente triste". Sobre su relación con ella da a entender con claridad que "no hay nada", lo cual desmiente que hablen todos los días, como le dijo la bióloga este fin de semana a un periodista. Ya explicamos este domingo que no es que haya mala ni buena relación, es que no hay, tal y como confirma ahora el italiano.

Serio, pensativo, reflexivo, parco en palabras y preocupado ha reaparecido Alessandro Lequio en Telecinco. Con la mirada al vacío, como perdida, decía: "Por respeto a mi hijo no voy a hablar de él", acertó a comentar. Además, desde la educación y el respeto, ha marcado claras distancias con la 'abuela', cuya conducta ha sido la contraria, poniendo el acontecimiento del nacimiento de su nieta o hija en lo más alto del mundo informativo, girando los focos hacia la recién nacida y hacia el hijo fallecido, dando detalles públicamente de que él es el padre post-mortem, exactamente lo contrario de lo que predica Lequio. 

No ha mencionado el aristócrata siquiera  a la niña que ha se ha convertido en protagonista absoluta de la actualidad por obra y gracia de las decisiones de su madre-abuela, la bebé que ha traído al mundo Ana Obregón en Miami por gestación subrogada y que, según sostiene la presentadora, está concebida a partir del esperma de su hijo Aless, fallecido hace tres años. Lequio expresa el rechazo, "rabia y tristeza", que le produce ver a su hijo en los medios mientras que Ana Obregón ha catapultado al fallecido colocándole en el centro del huracán.

Alessandro ha hablado desde la tristeza pero de sus pocas palabras se extraen conclusiones cuando se refiere al tsunami mediático que ha invadido a su familia y a su hijo fallecido. "Que mi hijo sea una vez más protagonista de la actualidad me produce rabia y tristeza". Ha cogido aliento para decir: "Yo no puedo escuchar una frase de mi hijo cuando enciendo la tele (...) Quiero vivir esto en la intimidad", confiesa el italiano. 

Sobre su relación con Ana Obregón, ha dicho que "no hay nada", es decir, que no hay relación, si bien eso también significa que "no hay ninguna mala relación". Porque no hay, ni mala ni buena, como dijimos en este portal. Por tanto, es falso, como se dijo, que hable con ella todos los días.

"Creo que Lequio no es apellido sino nombre"

El aristócrata italiano confiesa que no sabe al cien por cien el nombre de la niña nacida por gestación subrogada (lo cual ya es muy indicativo) pero, preguntado por ello, ha respondido: "Yo creo que Lequio es nombre", confirmando la primicia adelantada el pasado 1 de abril por este portal y que este domingo fue corroborada después de que el programa Fiesta (de la productora de Ana Rosa también) leyeran en directo el documento de adopción donde está inscrita la niña y donde se dice que el nombre es Ana Lequio y el apellido Obregón.

Lequio ha insistido en que "esta situación, como todo lo relacionado con Aless, es tremendamente triste, hasta complicado" y ha añadido que se siente "muy presionado". Comprende que haya una gran expectación por sus palabras pero lamenta decir que no va a contar más. "Cada uno lleva el luto como puede y como quiere", acierta a decir, que no es poco. Y él nunca lo ha llevado como Ana.

"Cuando mi hijo murió, todos habéis sido testigos de que mi única opción ha sido el silencio. No he comentado nada ni enseñado lo que sentía. No he dicho ni una palabra y lo voy a seguir haciendo porque es lo que le gustaría a él. Por respeto a él no voy a comentar nada que le afecte en ningún sentido. Sabéis que soy así y no voy a cambiar. Es lo único que voy a decir", señala.

"Me produce tristeza y rabia, que mi hijo sea una vez más protagonista de la actualidad. Quiero que cada uno lo lleve a su manera, pero yo no puedo encender la televisión y escuchar el nombre de mi hijo porque duele", señala.

"Quiero que sepan que esto lo vivo en la intimidad más profunda, no quiero compartirlo con nadie. Mis amigos no me preguntan, ni mi familia. Yo pido respeto, yo lo respeto también", sostiene. Sobre los comentarios acerca de la relación que tiene con Ana Obregón nos quedamos con esta frase tan significativa: "No hay nada", o sea, confirma lo adelantado por este portal: "No hay mala ni buena relación": "No hay nada".  Exactamente ha dicho que "no hay ninguna mala relación, no hay nada, todo bien, paz y amor. Cada uno con lo suyo", asegura.