Quién es Montse, la malvada suegra a quien nunca le gustó Shakira: no era ni joven, ni catalana

La frase "me dejaste de vecina a la suegra y con la deuda en Hacienda", y la bruja mirando hacia la casa de la madre de Piqué, que solo un temporal de viento ha retirado del balcón de Shakira, dicen mucho de la tensa relación que hay y ha habido entre la cantante colombiana y Montserrat Bernabéu, la madre de quien fuera su marido. El clásico enfrentamiento entre suegra y nuera en este caso se produjo desde el principo de la relación, allá por 2010, cuando finalizó el mundial de fútbol de Sudáfrica, donde la colombiana y el defensa de la selección iniciaron su romance.

En casa del jugador se llevaron cierto disgusto cuando la noticia del noviazgo se confirma. Gerard, entonces, era un chaval que con solo 22 años lo tenía todo, porque ya era un atractivo millonario al que le venía de casta el ser un tipo importante.

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Tal y como recuerda OK Diario, ya el abuelo del entonces jugador del Barça, Amador Bernabéu, era un histórico del club blaugrana. Su madre, Monserrat, es médico especialista en Medicina Física y Rehabilitación y junto con el padre, Joan, son el típico matrimonio catalán de buena familia que forma parte de la cerrada y clasista alta burguesía de Cataluña, de los que ven como intrusos a los que no son de apellido catalán y de su círculo social.

A la elitista madre de Piqué no le gustó la relación de su hijo con la estrella internacional, tal y como declaran personas de su entorno: "Estamos hablando de ambientes muy cerrados. Para muchas familias de la ciudad, si eres de Madrid ya eres un intruso. ¡Imagínate si eres de Colombia! Para Montse fue un shock", aseguran.

Las mismas fuentes cecanas a los Piqué-Bernabeu aseguran que el desagrado de la suegra hacia la de Barranquilla fue tal desde que conoció la relación: "La vio desde el principio como una intrusa. Un pez fuera del agua. Le molestaba todo de ella. Que fuera 10 años mayor que su hijo. Que fuera una cantante, por mucho éxito que tuviera. Que no fuera catalana o al menos de una familia reconocible. Es un círculo muy cerrado y muy clasista".

Los nietos marcaron una tregua

Los allegados de la burguesa familia coinciden al relatar el trato que se encontró la compositora por parte de su madre política, solo suavizado por el nacimiento de los hijos del joven matrimonio, Milan y Sasha: "Montse no se lo puso fácil. No se fiaba de ella. La veía como un capricho más de Gerard. Con el tiempo se hizo a la idea y creo que hubo momentos en los que incluso se acercaron, principalmente con el nacimiento de los nietos, la gran debilidad de toda la familia", aclaran.

La abuela paterna de los hijos de Shakira vio como su hijo se apartaba de su idílico entorno catalán para vivir su amor al 100%.Ella detestaba verle en las revistas de papel cuché como miembro de la farámbula y segundón del dúo, al ser internacionalmente señalado como el "novio de". La suegra pensaba también que para la cantante sería difícil acostumbrarse a vivr en Barcelona, "siendo una estrella de éxito mundial".

Tras el nacimiento de los nietos, Shakira no se convirtió en la nuera deseada, pero se la comenzó a tolerar e, incluso, le cogieron cariño. Montserrat tuvo que reconocer y admirar la increible capacidad de su nuera para conciliar su fama mundial y las exigencias de su trabajo con la vida familiar y la maternidad, y le reconocía el sacrificio que suponía atender a todo. Fueron unos años de apoyo por parte de los suegros que dejó de ser tal en cuanto el matrimonio comenzó a hacer aguas.

Quizá ellos tuvieron algo que ver en que la distancia se agrandara, porque los rumores en Barcelona dicen que ayudaron bastante a ocultar la relación del ex futbolista con la joven y cándida Clara Chía, hija de buena familia catalana. Shakira parace creer en esta "colaboración" de sus suegros para con su rival, y no tiene aspecto de que vaya a perdonar esa deslealtad en absoluto.