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El padre de la futura duquesa de Alba se sienta en el banquillo por estafa: así es Fernando Palazuelo


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    Es arquitecto y tiene una empresa de construcción que lo ha convertido en uno de los hombres más ricos de Perú: posee más de veinte edificios en el centro histórico de Lima. Aquí vive con su nueva familia (una esposa, la también arquitecta Luciana Soldi, y dos hijos), la que formó tras divorciarse de Sofía Barroso Fernández de Araoz, con la que tuvo a Fernando, Jaime, Beltrán y Sofía.

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    Se separaron en 2005 y en 2012 llegó el divorcio y los problemas, pues el matrimonio había creado una empresa de rehabilitación combinando sus habilidades profesionales (él constructor, ella experta en arte) que resultó ser un éxito. Según la madre de Sofía Palazuelo, su exmarido le estafó casi 50 millones de euros, y lo demandó por un delito de apropiación indebida. La Audiencia ha desestimado el recurso del arquitecto y será juzgado por descapitalizar la sociedad inmobiliaria Arte Express SA en perjuicio de los intereses de su exmujer, según El Mundo. En el escrito, el juez observa un "evidente abuso de sus facultades como administrador" de la empresa a la hora de trasladar las acciones de esta a la entidad panameña Hestia Group Corp, dejando a Barroso con una sola acción en su empresa madre.

    El padre de la duquesa de Huéscar y futura duquesa de Alba se enfrenta a una pena de prisión que podría llegar a los seis años.

    El conflicto de los padres ha generado una brecha insalvable en la familia, pues tanto Sofía Palazuelo como sus tres hermanos han apoyado a su madre en esta batalla judicial. Fernando no se habla con sus hijos y ni si quiera asistió a la boda en el Palacio de Liria entre Sofía y Fernando Fitz-James (el padrino de la novia fue su hermano mayor, Fernando), una unión que lo emparentó con una de las familias nobiliarias más importantes y poderosas de Europa. Tampoco al bautizo de su primera nieta, Rosario, la futura duquesa de la Casa de Alba.

    De hecho, dos de sus hijos, Fernando y Jaime, se trasladaron con él a Perú para hacer fortuna pero regresaron a España tras descubrir los tejemanejes contra su madre, tal y como declararon en agosto de 2019 en el juzgado de Palma, el primero que vio el caso.