Estilo de Vida

Greenery: el color de año también en gastronomía


    Informalia

    Pantone, o lo que es lo mismo, la autoridad mundial del color, ha elegido el que será el tono estrella y más destacado para este 2017, el greenery. Se trata de un verde ácido con mucho contenido de amarillo, que seguro va a presidir todas las facetas del diseño y estilo de vida en los próximos meses y por supuesto, la gastronomía no podía quedarse al margen.

    En nuestra alimentación este color es un imprescindible que evoca frescura, equilibrio y salud. Es la respuesta a una forma de vida que busca una alimentación lo más natural, rica y sana posible. El Pantone Color Institute ha decidido que sea el color de 2017, el cuál veremos presente en numerosos productos de venta al público pero también, en el ámbito gastronómico.

    Este verde "es un tono refrescante y revitalizante que simboliza los nuevos comienzos. Un chispeante y fresco tono verde amarillo que evoca los primeros días de la primavera, cuando los verdes de la naturaleza reviven, se renuevan y se recuperan", aseguran desde la institución estadounidense.

    Hace ya muchos años que se demostró como ciertos colores estimulan una parte del cerebro y con ello condicionan nuestras acciones, nuestras elecciones y apetencias, y aunque hay una gran parte cultural en ello, no es menos cierto que colores primarios como el rojo, el azul o el verde significan prácticamente lo mismo para todos los habitantes del planeta.

    El verde, en este caso, es el color de la naturaleza, gracias a su obvio vínculo con la mayoría de las plantas, símbolo también de la esperanza, la fertilidad y la juventud. Como asegura Leatrice Eiseman, directora ejecutiva del Pantone Color Institute: "Al satisfacer nuestro deseo creciente por rejuvenecer, revitalizar y unir, greenery simboliza la reconexión que buscamos con la naturaleza, con nosotros mismos y con un sentido más amplio de nuestra vidas".

    En gastronomía la cosa no es muy diferente. El verde suele asociarse con las frutas y las verduras, las hierbas aromáticas, con el equilibrio, con el slow food, con el apetito y por supuesto, con la salud. Se trata de conseguir platos elaborados con productos de la tierra, pensados para disfrutar cada bocado, saborear productos de calidad cocinados y degustados sin prisa. Por todo ello, os proponemos dos recetas que cumplen a la perfección con las características que Pantone quiere transmitir con el greenery:

    - Una ensalada de manzana, bacon, queso gorgonzola, nueces y vinagreta de mostaza y naranja, que es perfecta para recuperarnos de los excesos navideños ya que es ligera y muy completa. En ella, la jugosidad y dulzura de la manzana combinan a la perfección con la salinidad del bacon, el punto picante del queso y el amargor de las nueces.

    - Pulpo a la parrilla con mojo verde y papas arrugadas. El pulpo en su punto justo (ni muy duro, ni excesivamente blando) se acompaña de un mojo verde y unas papas arrugadas que parecen haber nacido para acompañar al pulpo a la brasa.