Estilo de Vida

Hablar francés como una vaca española: por qué seguimos teniendo dificultades con los idiomas


    Ignacio Vasallo

    Hablar francés como una vaca española es una de esas expresiones de las que nadie es capaz de explicarnos los orígenes. La que tiene más sentido, en mi opinión, es que ,con el uso, el vasco español que hablaba con ese fuerte acento típico de esta arte de los Pirineos se convirtió en una vaca. Todavía quedan franceses que imitan el acento, endureciendo la R, cuando dicen de alguien: "Il parle comme une vache espagnole".

    Está claro que en España tenemos dificultades con los idiomas -con la excepción de los catalanes- a pesar de lo mucho que se ha avanzado desde que los jóvenes universitarios han pasado temporadas en el resto de Europa con los programas Erasmus y con una mayor presencia, especialmente del inglés, en las escuelas. Muchos ya se las apañan en ese idioma y, en menor medida, en francés o alemán, pero lo que no ha mejorado es el acento. Han estudiado gramática pero no fonética.

    No entiendo cómo no se nos rompen los oídos cuando escuchamos en la radio o en la televisión, siempre con excepciones, a nuestros locutores, políticos de todo tipo y variados tertulianos, pronunciar nombres de ciudades bien conocidas o de personajes de relieve a lo bestia, sin ninguna regla. No lo pronuncian, ni en el idioma correspondiente, ni en español. Quizás no sea culpa suya, no pueden saber todo, pero sin duda es culpa de las correspondientes redacciones que deberían haberles pasado una chuleta, sobre todo cuando se trata de nombres que oímos centenares de veces a diario. En realidad, no creo que sea necesaria la chuleta porque conocen la pronunciación correcta, pero no quieren parecer presuntuosos o afectados.

    Waterloo, por ejemplo, la ciudad belga de la batalla, también famosa por ser la residencia de un conocido buscador de amnistía , se convierte en "uaterlu" como si de repente se la hubiera llevado Wellington con él de vuelta a Inglaterra, cuando resulta que se pronuncia de manera mucho más sencilla: "Vaterloo" en flamenco que debería de convertirse en "Vaterlo" o incluso "Baterlo" en español. Pues no hay manera: "uaterlu" domina. Se nota que el grupo sueco ABBA todavía tiene influencia.

    Otro nombre que se les atraganta es el de la presidenta de la Comisión europea que, desde su nombramiento ha pasado de un "bon der leye " a "Fon der leyen" tras la corrección de la pronunciación alemana de la V . Algunos avanzaron más y pronuncian el diptongo convirtiendo el Leyen en "Layen".

    En realidad, todos se quedan cortos. Cualquier alemán o alemana o españoles que llevaran tiempo viviendo allí, les explicaría que la pronunciación correcta es "Fon der Laen" sin abrir mucho la boca, como si estuviéramos sonriendo, pero a ver quién es el primero que se atreve.

    Más duro es escuchar cientos de veces al día el nombre del primer ministro israelí pronunciado a la española "Netanyaju", bien sonoro, pero no como ellos lo pronuncian. Incluso los corresponsales permanentes en Jerusalén, que seguro que saben pronunciarlo correctamente, optan por la violencia verbal. La correcta y más suave: algo parecido a "Natanaiu" solo se la he escuchado a Ignasi Guardans, que también acierta en otras lenguas.

    "Cualquier avance sería de agradecer. A fin de cuentas, somos un país turístico"

    Otro lío innecesario es el que se arman periodistas, políticos y público en general con el singular y el plural de los 16 estados federados alemanes-Land o Bundesland en singular. Länder o Bundesländer en plural. Aquí la pronunciación es secundaria. Es el concepto lo que cuesta entender. He leído: los "land" o el "lánder"…, con lo sencillo que es decir en español el estado de Hesse o los estados del Este de Alemania, por ejemplo.

    Algo ha mejorado en lo que va de siglo. La elección de George W. Bush como 43 presidente de los Estados Unidos, en el año 2001, fue recogida por algunos medios audiovisuales como la de "Basch", como si la "u" siempre se pronunciara "a". En el 2016 al nuevo presidente le llamaban correctamente "Tramp". Algo es algo.

    Perdón por la pretenciosidad lingüística, a lo mejor es que estoy afectado por el síndrome Dennings Kruger. No creo que las "vacas españolas" aprendan en el futuro próximo a pronunciar correctamente , aunque nuestro conocimiento de idiomas extranjeros mejore. Pero cualquier avance sería de agradecer. A fin de cuentas, somos un país turístico.