Casas Reales

Los príncipes Guillermo y Harry rinden homenaje a su madre, Lady Di


    Informalia

    Este jueves 31 de agosto tendrán lugar una serie de homenajes en memoria de Diana de Gales con motivo del veinte aniversario de su muerte. Sus hijos han querido adelantarse a estas conmemoraciones y este mismo miércoles le han rendido su particular tributo visitando el famoso Jardín Blanco de Kensington y recibiendo a los responsables de las asociaciones caritativas que en su día presidió Lady Di.

    Cientos de admiradores se reunirán el jueves en las famosas Puertas Doradas del Palacio de Kensington, donde de nuevo se ha levantado un altar con flores, velas, fotos y carteles en los que los ciudadanos han querido mostrar el gran amor y admiración que le tenían a la 'princesa del pueblo'.

    No obstante, los príncipes Guillermo y Enrique han querido desmarcarse de los actos oficiales, conmemorando a su madre con un ceremonia personal que se celebrará este miércoles y a la que también asistirá la Duquesa de Cambridge.

    Quien no asistirá a estos actos será el príncipe Carlos, que permanecerá en su residencia estival de Birkhall, en Escocia. Tampoco asistirá la reina Isabel II, quien seguirá en el Palacio Balmoral.

    A pesar de estas notorias ausencias, el propio Guillermo ha querido defender el duro papel al que tuvo que enfrentarse su padre: "Tuvo la valentía de comunicarnos la noticia y ha pasado por el mismo proceso de duelo que nosotros", declaró.

    Además, también ha respaldado la decisión que en su día tomó la reina Isabel II de permanecer en Balmoral en los días de luto nacional. "Fue una decisión muy dura. Ella se sentía dividida entre el hecho de ser abuela nuestra y su papel como reina", dijo durante una entrevista.

    Lo cierto, es que ha sido ahora, 20 años después de su fallecimiento, cuando los dos hijos de Diana han roto su silencio y han hablado de cómo afrontaron emocionalmente la trágica muerte de su madre. Mientras el príncipe de Cambridge confesó que su madre "fue un rayo de luz en un mundo gris" durante una documental que la BBC, Enrique desveló el gran trabajo que les ha costado poder hablar de ella: "Nunca ha sido fácil para nosotros hablar de nuestra madre, pero los 20 años son una buena ocasión para recordar a la gente cómo marcó la diferencia, no solo en la familia real sino en todo el mundo".

    Hace meses, el hijo pequeño de Carlos de Inglaterra reconoció que perder a su madre cuando tan solo tenía 12 años le acarreó una serie problemas psicológicos que superó recibiendo ayuda profesional.