Don Juan Carlos y Luis Alfonso de Borbón se abrazaron en Sotogrande
- El rey habló con su sobrino segundo
Informalia
El monarca visitó este domingo Sotogrande para entregar, por primera vez, los premios del 45 Torneo Internacional de Polo INDI. Allí protagonizó un encuentro con Luis Alfonso de Borbón, su sobrino segundo, con el habló tranquilamente, sin importarle el supuesto desencuentro que mantenía desde que el hijo de Carmen Martínez Bordiú y Alfonso de Borbón y Dampierrese autodenominara Su Alteza Real en 2004. El jinete se considera el legítimo rey del trono de Francia. La Familia Real española, sin embargo, no le reconoce como tal ni le concede los títulos que él lleva años exigiendo (duque de Anjou, duque de Touraine o duque de Borbón), títulos que ostentaba su padre pero que no son hereditarios.Luis Alfonso recibió el trofeo por su victoria con su equipo Lechuzas de Caracas, acompañado por su mujer, Margarita Vargas, y su madre.
El emérito se mostró simpático y risueño durante toda la jornada. Tras haber visitado Panamá, Noruega, Argentina, Venecia y haber realizado una ruta española para el recuerdo: Mallorca, Galicia y San Sebastián, el rey Juan Carlos (78) le ha puesto el broche del oro al verano en Sotogrande.
El padre de Felipe VI se trasladó a la localidad gaditana para asistir por primera vez a la final del 45 Torneo Internacional de Polo INDI, donde entregó los premios. Resultó vencedor el equipo de Dubái, que pertenece a la familia del jeque del país árabe, Mohamed bin Rashid Al Maktum, íntimo amigo del Rey.
Vestido con un estilo muy informal (pantalón claro y chaqueta marina), Juan Carlos se mostró muy simpático no solo con su sobrino sino con la larga lista de exclusivos invitados, como el príncipe Jeffrey de Brunéi o la princesa Azemah (hija del sultán Hasan al Bolkiah), y otros más nacionales con los que se sintió como en casa, como su sobrina, Simoneta Gómez Acebo, que iba en representación de Cartier, firma que es patrocinadora del evento y de la Simoneta es Directora de Comunicación.
A pesar del buen aspecto que mostró don Juan Carlos, lo cierto es que no se separó ni un segundo de su bastón, que aún necesita para andar. Además, para trasladarse desde las gradas de Los Pinos del Santa María Polo Club hasta el centro del césped, donde se entregaban los trofeos, el rey utilizó un pequeño carro de golf eléctrico.
Hace ya tres años que el monarca fue operado de la cadera para corregir una lesión que le había obligado a pasar por quirófano en otras ocasiones y parece que todavía no está recuperado. A pesar de que su cirujano, el el doctor Miguel Cabanela, aseguró en 2013 que el rey caminaría sin ayuda un año después, las previsiones no se han cumplido y no son pocos los que apuntan a su ajetreado ritmo de vida como posible culpable del retraso de su evolución favorable.