Charlene de Mónaco: sus vacaciones más solitarias
- Las ausencias de la princesa
Informalia
La Princesa de Mónaco se encuentra en la costa francesa de vacaciones, donde alterna largas jornadas de descanso con su nueva afición, el paddle surf. Eso sí, lo hace sola. Su marido, Alberto II, que acudió solo a la boda de su sobrino, Pierre Casiraghi, no ha compartido días de asueto con su esposa y sus hijos, Jacques y Gabriella.
Relajada, sonriente y completamente recuperada del doble embarazo de sus mellizos, Charlene disfruta desde hace unos días de un merecido descanso en la costa francesa. Aprovechando que los pequeños Jacques y Gabriella descansaban, la princesa visitó una pequeña y solitaria cala para practicar su nueva afición, el paddle surf. Ataviada con un bañador deportivo azul, un discreto pareo negro, gafas de sol y sombrero de paja, la ex nadadora, que estaba acompañada por unos amigos, pasó completamente desapercibida y se mostró de lo más natural y sencilla.
Charlene disfruta de unas vacaciones 'de soltera', ya que su marido, el príncipe Alberto, continúa con su agenda oficial en Mónaco y no ha acompañado a su familia en esta escapada. A pesar de que en los últimos meses se veía a la pareja muy cómplice y unida tras la llegada de sus hijos, lo cierto es que estos meses no ha habido una instantánea familiar en el que ha sido el primer verano del matrimonio como padres. La última ocasión en la que Alberto y Charlene aparecieron juntos y felices fue el pasado 26 de julio durante el Baile de la Cruz Roja de Mónaco, donde protagonizaron momentos muy románticos.