La discreta hija de Isabel Sartorius cumple 28 años: así ha cambiado Mencía Fitz-James

Mencía Fitz-James no acapara la atención mediática que en su momento recogió su madre, Isabel Sartorius, quien fuera una de las primeras novias conocidas del rey Felipe VI. No obstante, la discreción es algo en lo que se siente cómoda. A punto de soplar las 28 velas este 25 de julio, la hija de la socialité y Javier Fitz-James Stuart está plenamente centrada en su crecimiento profesional.

Han pasado trece años desde que la joven posara con su madre en la portada de Hola, tres años antes de cumplir la mayoría de edad. Sin embargo, aunque podría haber aprovechado el tirón de su historia familiar, optó por tener un perfil bajo, basando sus esfuerzos en sacar buenas notas, ascender laboralmente y disfrutar de sus relaciones personales.

La joven cuenta entre sus amistades con la hija de Blanca Suelves -hija de otro icono de nuestra sociedad en los 90, la aristócrata Blanca Suelves-. Y, en lo referente al terreno amoroso, sabemos que ha entregado su corazón a jóvenes tan apuestos como el rejoneador y empresario Luis Valdenebro, sevillano descendiente de una de las familias mejor conectadas de Sevilla. Anteriormente, también mantuvo una relación con Adil El Assir, el hijo pequeño de María Fernández Longoria y Abdul Rahman El Assir, empresario libanés y amigo del rey don Juan Carlos, tal y como contamos desde Informalia.

Actualmente, Mencía trabaja como Assistant Sustainability Manager en Iberdrola Offshore Renewables con sede en Londres, donde lleva desde 2024 liderando proyectos sobre energías renovables marinas. Su anterior etapa la desarrolló a caballo entre Madrid y Glasgow, dentro del grupo Iberdrola y su filial ScottishPower, siempre en puestos relacionados con desarrollo sostenible, experiencia de cliente y derechos humanos.

La joven estudió Ciencias Políticas en Georgetown University, con una especialización en mediación y resolución de conflictos, y después cursó un posgrado en marketing en ESIC. Además, ha participado en cooperación internacional en la Fundación Banco Santander y ha realizado un voluntariado con mujeres migrantes e iniciativas educativas en cárceles, proyectos que requieren gran fuerza emocional. Para ello, siempre se ha apoyado en su madre, con la que mantiene una relación excelente.

El apoyo fundamental de Isabel Sartorius

Asimismo, Isabel Sartorius también encuentra en su hija un apoyo fundamental. Tal y como informamos en enero del pasado año, la muerte de César Alierta la dejó destrozada. Con el expresidente de Telefónica mantuvo una relación de cuatro años, la cual derivó en una bonita amistad. El directivo fue un gran apoyo emocional y también económico porque no solo le procuró un trabajo como responsable de acciones de cooperación en una empresa que trabajó para la Fundación Telefónica, sino que también la animó a instalarse en un gran piso de lujo en el mismo barrio de Chamberí, en el que llegaron a convivir discretamente.

El gran piso de Chamberí se cambió por otro más normal para ella sola después de que su hija se independizara al volver a España después de estudiar en Estados Unidos. Esa mudanza tuvo lugar cuando Alierta pasó por graves crisis de salud a causa de sus problemas cardiacos. Entonces, Isabel estuvo pendiente de su evolución. A su vez, ella, como adelantamos desde este digital, sufrió una rotura de cadera que la tuvo inmovilizada. A Isabel nunca le faltaron las atenciones de Alierta y su apoyo incondicional. Por ello, tras su adiós, se vio obligada a encarar un futuro incierto y solitario, de difícil pronóstico.