Casas Reales
Guillermo y Kate Middleton dicen 'basta': los príncipes preparan demanda contra el medio que ha filtrado sus vacaciones en los Alpes
- Se alojan en la casa de unos amigos con sus tres hijos, George, Charlotte y Louis
- El lujoso destino de vacaciones del príncipe Guillermo y Kate Middleton (también elegido por los Beckham y Carolina de Mónaco)
Informalia
Tremendo cabreo el de los Príncipes de Gales tras darse a conocer el destino de sus vacaciones de Semana Santa: los Alpes franceses. Guillermo de Inglaterra y Kate Middleton querían disfrutar de unos días de descanso junto a sus hijos, George, Charlotte y Louis, alejados del foco mediático que tanto les molesta últimamente. Los herederos de la Corona británica han puesto el grito en el cielo tras ver sus imágenes en la portada de Paris Match y han dicho 'basta'.
Según The Telegraph, el enfado de Guillermo y Kate es tan grande que ya han comunicado a sus abogados su intención de tomar medidas legales contra el citado medio de comunicación. No sería la primera vez que el matrimonio real marca los límites a la prensa sensacionalista: en 2012 se enfrentaron a la revista francesa Closer cuando publicó a la princesa disfrutando de un día de playa en Luberon, al sureste de Francia. Los príncipes ganaron el juicio por un delito de invasión de la intimidad y tanto el editor jefe como el director del medio tuvieron que pagar una multa de 45.000 euros.
Esta ocasión no es muy diferente, aunque Kate ha cambiado el traje de baño por la ropa de nieve. Los príncipes volaron el pasado fin de semana a los Alpes franceses para disfrutar de uno de sus deportes favoritos: el esquí. Es uno de sus destinos favoritos, ya que la indumentaria les ayuda a pasar desapercibidos para curiosos y paparazzi, aunque en esta ocasión no han tenido suerte.
La prensa francesa ha publicado varias fotografías de la familia mientras desayunaban en la terraza de la casa en la que se alojan y han contado que los niños hicieron un muñeco de nieve que se deshizo rápidamente por las buenas temperaturas: "Lo habían colocado a la entrada del discreto chalet, propiedad de unos amigos de la pareja, situado en el borde de uno de los bosques de la estación", cuentan.