Casas Reales

El príncipe Guillermo sorprende al hablar de la salud de Kate Middleton desde Sudáfrica: "Increíble"


Informalia

Sonriente, relajado y 'casual'. Así hemos visto este miércoles al príncipe Guillermo de Inglaterra en Ciudad del Cabo. Es la última parada de su tour por Sudáfrica como fundador del Earthshot Prize, una asociación que lucha por la salud del planeta y cuyos premios se inauguraron en 2021. Una gala a la que no ha podido asistir Kate Middleton, cuya ausencia esta edición ha estado justificada por su estado de salud. Y aunque su marido apenas ha dado información al respecto desde que le diagnosticaran un cáncer a la princesa, esta vez se ha saltado su propia norma para compartir su alegría: "Está increíble, en realidad, ha estado increíble todo el tiempo", ha dicho a los reporteros.

El príncipe de Gales ha asegurado también que a Kate le hubiera gustado viajar con él y que estaba "ansiosa" porque todo saliera bien durante la gala. "Me ha estado animando todos estos días", ha confesado.

La salud de la princesa, que terminó el tratamiento de quimioterapia el pasado mes de septiembre, mejora a pasos agigantados y también su ánimo, porque según Robert Jobson, biógrafo de Casas Reales, "Kate ya está haciendo todo lo que quiere hacer. Ha vuelto al gimnasio". Asegura, además, que "empezaremos a verla mucho más y llevará a cabo compromisos además de seguir trabajando detrás del foco mediático". De hecho, ya está preparando las próximas fiestas navideñas: "Ya se ha reunido con su equipo de empleados".

Buenas noticias que se reflejan en la mirada y la sonrisa de Guillermo de Inglaterra, que ha dejado atrás el rostro circunspecto que ha ofrecido todos estos meses. En Sudáfrica, el príncipe ha recuperado su mejor versión, la más cercana y divertida, saltándose incluso los estrictos protocolos que se imponen en Buckingham Palace. Y es que el hijo de Carlos III ha lucido una pulsera infantil con la palabra 'DAD' (papi) por la que le han preguntado: "Bueno, esto es una reliquia, por así decirlo, de un concierto de Taylor Swift para el que mi hija decidió que quería crear una pulsera. Me la regaló cuando me fui. Así que le prometí que la usaría y que intentaría no perderla mientras estuviera aquí", ha contado.