La extrema delgadez no ha restado un ápice de elegancia a la princesa de Gales en su reaparición

Sabiéndose, más que nunca, el centro de todas las miradas, Kate Middleton ha sostenido una sonrisa valiente durante la mayor parte del evento. A juego con sus tres hijos, entre la estética marinera y la de Audrey Hepburn en My Fair Lady, podemos decir que la futura reina de Inglaterra ha exhibido un aspecto saludable dadas las circunstancias, una buena prueba de que se puede mantener un gran nivel de belleza en medio de un tratamiento como el que está recibiendo la mujer del heredero al trono británico.

Las escenas aportan un toque de optimismo dentro del secretismo al que está sometida la salud de la princesa. A falta de más informaciones, parece al ver a la consorte que el tratamiento está yendo bien. Prueba de ello, más allá de su reaparición este sábado en el desfile militar, es el radiante vestido blanco de Jenny Packman que ha elegido la nuera de Carlos III para el Trooping the Colour 2024.

La princesa de Gales no ha seleccionado el blanco para la gran cita de este sábado por casualidad. Este color representa la esperanza y el optimismo, sentimientos que acompañan a Kate en este momento vital de su vida.

Para elevar su elegante look , Kate Middleton ha optado por una pamela en los mismos tonos que el vestido. A pesar de su enfermedad, la madre de George, Charlotte y Louis ha reaparecido este sábado con unos stilettos de piel en blanco roto. En cuanto al bolso, la princesa de Gales ha apostado por un diseño sobrio en color negro de la firma Mulberry England.