La prensa francesa ensalza a Leonor en su gran día en Zaragoza: "Llegó sola", estaba "muy orgullosa"
Ana Gómez Viñas
"Muy orgullosa". Así se mostró la princesa de Asturias y Girona en su gran día en Zaragoza donde recibió triple distinción: la Medalla de las Cortes, la de Aragón y el título de Hija Adoptiva de la capital aragonesa. Una fiesta que la heredera vivió en solitario, sin la presencia de los Reyes, quienes con su ausencia le cedieron todo el protagonismo. La dama cadete Borbón Ortiz ocupa los titulares de la prensa francesa. En concreto del semanario Point de Vue, que ensalza su papel y "su orgullo" al recibir las más altas distinciones de la comunidad aragonesa.
Señala la publicación gala que este 21 de mayo de 2024, "la heredera Leonor recibió el título de Hija Adoptiva de Zaragoza, la Medalla de Aragón y la Medalla de las Cortes durante varios actos oficiales y religiosos". La hija de don Felipe y doña Letizia iba "con su uniforme de alumna de la Academia General Militar de Zaragoza"; y continúa: "Llegó sola, mostrando en diversas ocasiones su inmenso orgullo al recibir el homenaje".
Hubo tres actos en tres escenarios distintos. La foto del día nos llegó durante el paseo viral de Leonor por la capital aragonesa. Un recorrido desde la plaza del Pilar hasta la plaza de la Seo que, a pie, se hace en cuatro minutos y que a la hija mayor de los Reyes le llevó casi 20. "¡Guapa, princesa!" Selfies, saludos y cientos de fotos. Leonor, uno a uno, fue saludando a los vecinos que se agrupaban en los aledaños de la Catedral del Salvador de Zaragoza, donde el Gobierno aragonés le hizo entrega de la Medalla de Aragón. Era la tercera distinción. Un homenaje de la comunidad aragonesa a la Princesa, que ella ha agradecido a los vecinos en la calle.
En la ceremonia de clausura de la jornada la hija de Felipe y Letizia tomó la palabra y habló desde el corazón. Con un discurso que encajaba con la escritura de su madre, Leonor recibió todos los honores en Zaragoza. Los Reyes estuvieron muy presentes en su intervención: "Venía con muchas expectativas por todo lo que me había contado mi padre", comenzó. "En Zaragoza, en Aragón, me he sentido en casa, acogida y acompañada en una tierra que siempre formará parte de mi vida. Quedan sólo cinco semanas para que me vaya, para que reciba mi despacho de alférez, y ¡ya empiezo a echaros de menos!", subrayó dirigiéndose a sus compañeros y compañeras cadetes de la Academia. "Gracias Zaragoza. Gracias Aragón. Gracias a todos los que habéis hecho posible que en este tiempo me sienta una aragonesa más y una maña más".