Casas Reales

Leonor, su discurso desde el corazón en Zaragoza: "Me siento una aragonesa más, una maña más"


Ana Gómez Viñas

La princesa de Asturias y Girona ha vivido su gran día en Zaragoza. La tercera escala de esta triple distinción (Medalla de las Cortes, Hija Adoptiva de Zaragoza y Medalla de Aragón) ha tenido lugar en la Catedral de San Salvador de la capital aragonesa. Una vez que el presidente de la comunidad, Jorge Azcón, le ha hecho entrega de su distinción, la hija mayor de los Reyes ha tomado la palabra.

Ha sido un discurso desde el corazón. Con unas palabras cercanas que encajaban con la escritura de su madre, la Reina, Leonor ha recibido todos los honores en Zaragoza. Los Reyes han estado muy presentes en su intervención: "Venía con muchas expectativas por todo lo que me había contado mi padre", ha comenzado.

"En Zaragoza, en Aragón, me he sentido en casa, acogida y acompañada en una tierra que siempre formará parte de mi vida. Quedan sólo cinco semanas para que me vaya, para que reciba mi despacho de alférez, y ¡ya empiezo a echaros de menos!", ha subrayado dirigiéndose a sus compañeros y compañeras cadetes de la Academia. "Aquí he conocido a jóvenes de mi generación y he convivido con ellos. Lo que vivimos mientras nos formamos en la Academia nos une para siempre y nos hace madurar y crecer gracias al compañerismo", ha continuado.

Leonor ha vuelto a mencionar a don Felipe, que en su formación militar en la Academia General de Zaragoza ejerce de guía: "Mi padre lo vivió de un modo parecido hace casi 40 años y en estos días hemos hablado mucho de ello. Seguir sus pasos significa mucho para mí". Ha terminado con un saludo: "Gracias Zaragoza. Gracias Aragón. Gracias a todos los que habéis hecho posible que en este tiempo me sienta una aragonesa más y una maña más".