Kate Middleton o cómo escenificar una imagen de tranquilidad: en coche, con gafas de sol y mirando a cámara

La altísima demanda social y mediática de una imagen de Kate Middleton ha hecho que, finalmente, Kensington Palace, escenificara una salida familiar para la princesa de Gales. Las fotografías, que dieron la vuelta al mundo, suponen su reaparición desde antes de que fuera ingresada en The London Clinic, el 16 de enero, donde fue operada de la misteriosa cirugía abdominal de la que no ha trascendido ni un solo detalle. De hecho, su última aparición pública data del 25 de diciembre del año pasado, cuando asistió al servicio religioso de Navidad que se ofició en Sandringham.

Que si no es Kate, que es su hermana Pippa, según el runrún de las redes

Nada más lanzar la fotografía a los medios, comenzaron a circular teorías sobre ella. Que si no es Kate, que se trata de su hermana Pippa; y que la imagen fue tomada el pasado domingo 3 de marzo en las inmediaciones del Castillo de Windsor y no se hizo pública hasta el día siguiente. El parecido entre las dos Middleton es más que evidente. De hecho, los usuarios de redes que apuntan a Pippa lo achacan a que su rostro luce algo más ancho e hinchado.

Al margen de las redes, la fotografía se escenificó así. Luz de día, cerca de Windsor y acompañada por su madre, Carole, que va al volante del Audi. Kate, de 42 años, esboza una leve sonrisa. Lleva las gafas de sol, está protegida de los focos, pero en un momento mira a la cámara. No conduce. Esto también está pensado así. Que maneje Carole.

El mensaje de Kensington Palace siempre ha sido que Kate está "bien". Desde la Casa la comunicación ha ido siempre en esa línea. Pero no teníamos ni una foto de ella. Hasta ahora. Esta foto viene a parar lo que las palabras ya no paraban: una ola de rumores sobre su estado de salud, a cuál más descabellada. La imagen familiar de Kate con su madre nos muestra una mujer convaleciente tras un ingreso hospitalario de casi dos semanas.