Cristina e Iñaki Urdangarin paralizan la negociación de su divorcio hasta septiembre: el cabreo de la infanta
Informalia
El 5 de junio era la fecha marcada en el calendario para oficializar la ruptura matrimonial de la infanta y el ex deportista. Coincidía con el 18 cumpleaños de su hija Irene, una fecha clave que les daba vía libre para repartir bienes sin custodias de por medio. Sin embargo, los últimos acontecimientos han paralizado el último tramo de la negociación y la firma del divorcio se retrasará, al menos, hasta el próximo mes de septiembre.
Según Monarquía Confidencial, la iniciativa ha sido de la infanta Cristina: "Aparcará su situación sentimental hasta después del verano porque necesita un respiro", aseguran fuentes cercanas. Los motivos son dos: por un lado, la delicada relación que mantienen en estos momentos Iñaki Urdangarin y su hija Irene, que lo culpa del sufrimiento de su madre y se niega a conocer a la nueva novia, Ainhoa Armentia. Por otro, las altas exigencias del que fuera duque de Palma: "Cristina no las acepta", han afirmado.
Recordemos que la infanta y el padre de sus cuatro hijos anunciaron su separación en enero de 2022, después de que la revista Lecturas publicara las primeras imágenes de Urdangarin en actitud romántica con su compañera de trabajo: "De común acuerdo, hemos decidido interrumpir nuestra relación matrimonial. El compromiso con nuestros hijos permanece intacto. Dado que es una decisión de ámbito privado, pedimos el máximo respeto a todos los que nos rodean", rezaba el comunicado.
Un año después, parecía que la situación estaba encauzada gracias, sobre todo, a la intervención del emérito. Don Juan Carlos no quería convertir el divorcio de su hija en un espectáculo y se ofreció a hacerse cargo de los gastos del proceso y también de la pensión del que fuera su yerno. "El emérito ha dicho que se dejen ya de negociaciones, de regateos y que se cierre de una vez por todas el divorcio; que él asumirá lo que tenga que asumir incluido el coste añadido", dijo entonces el periodista Juan Luis Galiacho. Los primeros acuerdos entre Urdangarin y la infanta Cristina estipulaban una paga mensual de 25.000 euros para él y un solo pago de dos millones de euros en concepto de indemnización, algo que le pareció insuficiente: "Él ha pedido más, tanto en la pensión mensual como en la indemnización de dos millones, que le parecen pocos. Además, los quiere en un solo pago".