Casas Reales

La milmillonaria fortuna de Carlos III a semanas de su coronación: patrimonio, joyas, Rolls, Monets...


    Ana Gómez Viñas

    Londres se prepara a toda máquina para la ceremonia de coronación de Carlos III el 6 de mayo. En esta cuenta atrás, sale a luz la milmillonaria fortuna privada del monarca: unos 1.815 millones de libras (unos 2.060 millones de euros). Lo publica The Guardian en un extensísimo reportaje en el que recoge la valoración de sus bienes: propiedades (Buckingham, Lancaster, Kensington, Balmoral...), coches de coleccionista (Rolls, Bentley, Jaguar), piezas de arte (Rembrant, Dalí, Monet) y el joyero real. Foto inferior, un nuevo retrato del monarca, de Alistair Barford, presentado por Champagne Bollinger e Illustrated London News el 18 de abril con motivo de su inminente coronación.

    La fortuna del soberano ha llenado ríos de tinta en los medios desde la muerte de su madre, Isabel II, en septiembre de 2022. El monarca y patricarca de la familia Windsor heredó unas cuentas que le convierten en millonario con mayúsculas. Según estimó entonces Forbes: 128.000 millones de euros. Por delante, incluso, de Amancio Ortega. Una cifra que engloba no solo su patrimonio en bienes inmuebles, sino también su sueldo, la herencia de su madre y hasta la facturación de su empresa Duchy Organic de galletas de avena eco de sus cultivos de Cornualles. Todo un visionario del mundo bio.

    No tributa en concepto de sucesiones sobre el patrimonio

    Para abrir las arcas del soberano hay que remontarse a 1993. El entonces primer ministro, John Major, cierra con la corona británica un acuerdo histórico para regularizar una nueva situación fiscal de la monarquía. El trato consistió en que Isabel II y Carlos comenzaran a pagar a Hacienda un 40% de sus ingresos privados. Quedaba exento de ese pago la asignación oficial, que en un principio se llamaba Civil List (Lista Civil) para después pasar a denominarse Sovereign Grant (Subvención Soberana). O sea, su sueldo. En ese acuerdo también se recogía una claúsula que dejaba fuera el impuesto de sucesiones sobre el patrimonio: los palacios y su inabarcable colección de arte. Según el premier, con esta cláusula se pretendía evitar la erosión del patrimonio real, una anotación que levantó polvareda. Por contraste, hay que recordar que los británicos pagan en torno al 40% del impuesto de sucesiones. Estas son las cifras de Carlos III, según los datos de Forbes.

    Sovereign Grant: 98 millones

    El sueldo. La Subvención Soberana para la monarquía se fijó en 98 millones de euros que se destinan para el personal, la seguridad, los gastos de viajes oficiales y el mantenimiento de propiedades. De esa cantidad, 1,8 millones fueron en 2021 para Carlos y su esposa, Camilla Parker-Bowles, por su entonces condición de heredero.

    Los activos en bienes inmuebles. los Windsor poseen en activos inmobiliarios casi 28.000 euros (en concreto, 27.750 millones), que no se pueden poner a la venta. Según la citada publicación, The Crown Estate es una cartera de bienes raíces de 19.466 millones de euros en activos netos, como la concurrida Regent Street y el emblemático hipódromo de Ascot. Sin opción a venta, la familia sí obtiene ingresos por patrimonio (valorados en 363 millones, según New York Times), que van a parar al Tesoro. Regent St., hot spot comercial de Londres, está ubicada en el West End y aúna fimas como Burberry, Apple o la misma Zara, en el 118 de la calle. 

    También habría que sumar los palacios. El de Buckingham, 4.895 millones; Cornualles, 1.288 millones; Lancaster, 746 millones; Kensington, 627 millones; y The Crown Estate en Escocia: 589 millones.

    La herencia

    Carlos III ha recibido de su madre unos 500 millones, en conceptos de activos, arte, joyas e inmuebles como Sandringham (la casa donde Isabel II reunía a su familia por Navidad); y el Castillo de Balmoral, en las Tierras Altas escocesas, donde falleció la soberana. El nuevo rey no tendrá que liquidar el impuesto de sucesiones, al quedar exento.

    En su colección de arte se encuentran obras de Rembrandt, Vermeer, Caravaggio y Leonardo Da Vinci. También, la Royal Philatelic Collection (unos 100 millones). Mención expresa merecen las joyas de la Corona. Un informe de Brand Finance del año 2017 estima el joyero real en 12.700 millones de dólares.

    Isabel II recibió en herencia de su progenitora, la Reina Madre, 70 millones de euros, que incluían inversiones en pintura, con obras fimadas por Claude Monet y Paul Nash; así como tiaras, joyas y una colección de la casa Fabergé. Se trata de 900 piezas del joyero ruso, que datan del siglo XIX, entre las que se encuentran los huevos imperiales de Pascua de Fabergé. 

    La marca Reino Unido

    La Firma (Monarchy PLC) funciona como un imperio empresarial. La imagen de la monarquía es marca Reino Unido y está consolidada. Según un estudio del citado Brand Finance, supone la inyección de 2.300 millones de euros en la economía del país por su aportación al turismo y al merchandising (souvenirs, camisetas, llaveros y tazas de té con retratos de los Windsor).

    Las galletas de avena eco

    Además de la herencia, hay que subrayar la rentabilísima gestión de Carlos III en el ducado de Cornualles, convertido en granja ecológica y sostenible con productos orgánicos, cuya facturación en 2021 fue de 28 millones de euros. Sus productos se comercializan en supermercados gourmets bajo la marca Duchy Organics. 

    Antes de la pandemia, en 2019, facturó más de 200 millones de euros, que fueron a la  fundación que lleva su nombre. Este próspero negocio ecosostenible, sin químicos ni fertilizantes, comenzó en 1990. Carlos, comprometido con el medio ambiente, ya era un visionario con sus galletas de avena eco. Ahora su marca vende unas 250 referencias.