Los Urdangarin Borbón pasan la nochevieja con Iñaki, pero sin conocer a su novia
Informalia
Como todas las familias, las fiestas navideñas se reparten entre la Nochebuena con unos abuelos y la Nocheviaja con los otros. Así han pasado tradicionalmente las fiestas los hijos de la infanta Cristina e Iñaki Urdangarín, unas fiestas en Zarzuela y otras en Vitoria. Este año ha sido igual, pero la Nochevieja con papá no ha incluido todos los nuevos factores que hay en la vida del progenitor de Pablo, Juan, Miguel e Irene. Los sobrinos del rey Felipe VI no conocen todavía a Ainhoa Armentia, la nueva novia de su padre, relación que ha sido el detonate para el divorcio de sus padres.
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Los cuatro hermanos Urdangarín se reunieron con Iñaki en Vitoria el día 27 de diciembre, tras pasar Nochebuena y Navidad en el palacio de la Zarzuela con sus reales tíos, sus primas y su abuela, la reina Sofía. Viajaron a la capital vasca para pasar el fin de año con papá Iñaki. Allí disfrutaron de su abuela Claire Liebaert y de sus familiares paternos, tal y como demuestran las fotografías publicadas por Hola.
Aunque la relación entre Iñaki y su nueva novia, la abogada Ainhoa Armentia, es firme y va muy en serio, los cuatro hijos de Cristina aún no la conocen y, por supuesto, no han pasado la Nochevieja con ella. En este sentido, las familias no se mezclan todavía. Ainhoa, por su parte, también es madre de dos adolescentes que tampoco conocen a Urdangarín y a sus hijos.
Iñaki y Ainhoa pasaron juntos el 23 de diciembre y también se reunieron durante unas horas el día de Nochebuena. Justo hace ahora un año que su relación saltó a los medios de comunicación cuando Lecturas publicó unas fotos de la abogada y el ex marido de Cristina pasenado por una playa en actitud romántica.
Se trataba de un amor a escondidas, que tras ver la luz se ha consolidado y ha conseguido acabar con los 25 años de matrimonio de Cristina e Iñaki, en los que ya habían tenido que superar momentos tan duros como la condena de él a 5 años y 10 meses por malversación, prevaricación, fraude a la Administración, dos delitos fiscales y tráfico de influencias en el caso Nóos, y su paso por la cárcel de mujeres de Brieva, en la que ingresó en junio de 2018.
A pesar de estos desgraciados acontecimientos, los cuatro hijos de la hermana del rey de España no dan que hablar, salvo cuando se conoce algún éxito en sus estudios, en acciones de voluntariado o en sus actividades deportivas.
Son los cuatro sobrinos reales de los que Zarzuela no tiene que preocuparse, muy al contrario de lo que ocurre con los dos hijos de la infanta Elena, Froilán y Victoria Federica, que aparecen constantemente en los medios de comunicación por su extremada exposición pública, su alocada vida nocturna y los múltiples problemas que se buscan en trifulcas y accidentes automovilísticos.