Begoña Gómez y su estilismo de gala en el Palacio Real: tres guiños y un error
Pilar Fernández
La primera dama Begoña Gómez (43) acudió este miércoles a la cena de gala ofrecida en el Palacio Real al presidente chino Xi Jinping, y su esposa, Peng Liyuan. Sabedora de que su look sería analizado con lupa, personalizó un diseño español con el que lanzó varios mensajes 'ocultos'. Eso sí, patinó en la elección del peinado.
1. Diseñador asturiano
El vestido elegido por Begoña Gómez para asistir a la cena de gala no era made in China sino español, y para más dato, asturiano. La defensa por parte de la esposa de Pedro Sánchez de la moda española es ya inequívoca.
2. Inspiración asiática
Begoña Gómez homenajeó a los invitados con el estampado de su vestido, unos bordados con paillettes, lurex e hilo de seda de inspiración china, muy exóticos, en los que destacaban las grandes flores (como hiciera Letizia esa misma mañana con unos bordados de ASOS). El vestido pertenece a la colección primavera-verano 2018 y tiene dos versiones: kimono y gala occidental. La inquilina de la Moncloa los fusionó para crear un modelo personalizado, sin fajín ni cola y con un escote más discreto que el original.
3. Color rojo
No sólo es el color favorito de la esposa de Pedro Sánchez y también el que identifica el partido que lidera su marido, el PSOE (lo luce muy a menudo), sino que además, el rojo es el color de la bandera china.
Begoña patinó en el 'beauty'
Y si en la elección de su vestido estuvo de lo más acertada, no se puede afirmar lo mismo de su beauty look. ¿La razón? El pelo. Las normas protocolarias dictan que el cabello de una dama debe estar completamente recogido en una cena de gala o etiqueta, como era el caso, ya que el pelo suelto se reserva para un evento de día o en cenas denominadas de 'media etiqueta'. En cualquier caso, el medio recogido de Begoña, hacia atrás y cardado, era tan favorecedor que podemos hacer la vista gorda.
La cena fue el broche de oro a la visita oficial del presidente chino Xi Jinping, y su esposa, Peng Liyuan, a España, que ha durado tres días. El evento contó con más de cien invitados, entre ellos figuras políticas como la presidenta del Congreso, Ana Pastor, o la alcaldesa de Madrid, Manuela Carmena. Todos disfrutaron de un menú elaborado por Paco Roncero en el que destacó el jamón. Los reyes bordaron su papel como anfitriones y Letizia brilló luciendo por primera vez la tiara Rusa, una magnífica pieza del joyero real realizada en platino, perlas y diamantes. Fue creada para la regente María Cristina de Austria, tatarabuela de Felipe VI, y tras la muerte de Alfonso XIII pasó a Mercedes de Borbón, madre de don Juan Carlos.