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Gema Gámez, esposa de Miguel Blesa, destrozada tras su muerte


    Informalia

    Le dio el "sí, quiero" en 2013 y desde entonces no se había separado de su lado. Este miércoles se ha convertido en su viuda después de que el ex presidente de Caja Madrid haya sido encontrado sin vida en el interior de su vehículo en una finca de Córdoba, donde iba a disfrutar de una cacería con sus amigos. La que ha sido su esposa en los últimos cuatro años está absolutamente rota de dolor.

    Gema Gámez (45) está viviendo el peor momento de su vida. Su marido, Miguel Blesa (69), ha perdido la vida en la mañana de este miércoles por un tiro en el pecho con una escopeta de caza. El ex presidente de Caja Madrid se encontraba disfrutando de una cacería en la finca cordobesa de unos amigos y nada hacía presagiar la tragedia. Según fuentes de la Guardia Civil, tras desayunar con sus acompañantes, comunicó que se dirigía al garaje para mover su coche y ya no regresó. Ante la tardanza, uno de sus amigos fue a buscarlo y lo encontró ya muerto en el interior de su vehículo. Todo apunta a que se trata de un suicidio.

    Gema Gámez fue avisada de inmediato y se encuentra en estado de shock. Hace sólo cuatro años que se casó con Miguel Blesa y se ha mantenido a su lado en los peores momentos. Se conocieron en Caja Madrid, donde ella trabajaba en el Departamento de Mercado de Capitales. Poco les importó los 27 años de diferencia que existía entre ambos. Su noviazgo, a pesar de los esfuerzos de ella por mantenerlo en secreto, se hizo público cuando él abandonó su cargo de director en febrero de 2010 a favor de Rodrigo Rato. Poco después, Gámez también abandonó su cargo y pasó a ser administradora única de la empresa Octubre en Florida, un negocio situado en la calle Goya de Madrid en el que Gema, personalmente, vendía abrigos de piel y marroquinería a clientas selectas del Barrio de Salamanca.

    Antes de que Blesa fuera imputado por el caso de las Tarjetas Black, la pareja mantuvo un alto tren de vida con viajes en barco por la Costa Azul y Turquía, así como estancias en Sotogrande y Miami. Disfrutaron de coches deportivos y se concedían caprichos como encargar caviar a domicilio o realizar cacerías por medio mundo, a las que ella siempre le acompañaba a pesar de no ser aficionada. En esta, casualidad o no, había decidido quedarse en Madrid.

    Gámez y Blesa planeaban casarse en junio de 2013 en la finca Las Jarillas, acompañados por invitados ilustres como Francis Franco y el torero Sebastián Palomo Linares, además de su íntimo José María Aznar. Finalmente no pudo ser. La entrada de Miguel Blesa en la cárcel de Soto del Real dio al traste con los planes de la pareja, que pospuso el enlace hasta octubre con una lista de invitados mucho más austera. No acudió la hija de Blesa, Cus, fruto de su matrimonio fallido con María José Portela, que no mantiene ninguna relación con su madrastra, Gámez.

    El pasado mes de febrero, la Audiencia Nacional condenó al ex presidente de Caja Madrid a seis años de prisión y una multa de 7200 euros por apropiación indebida en el caso de las Tarjetas Black.