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El príncipe Lorenzo es la oveja negra de la Familia Real belga

  • Intenta colar gastos privados como oficiales

Informalia

El hermano pequeño del rey Felipe acaba de sumar un nuevo escándalo a una historia de lo más controvertida. En esta ocasión, el Príncipe quiso colar una serie de gastos personales como si fueran derivados de actividades oficiales para el Estado.

Lorenzo tiene 52 años, está casado con Claire Coombs desde 2003 y tiene tres hijos: Luisa, de 11, y los gemelos Nicolás y Aymeric, de 10. Desde hace años además es el rostro más díscolo de la monarquía belga. Actualmente cobra del Estado 300.000 euros anuales, que debe administrar en dos partidas: una considera salario y otra gastos de representación.

Al igual que los demás miembros de la familia real de Bélgica, tiene que someter sus gastos al tribunal de cuentas. Pues bien, según publica el diario La Libre Belgique, Lorenzo ha intentado colar como gastos institucionales recibos de una cadena de supermercados, artículos escolares para sus hijos y los costes de un viaje de esquí, incluidos por él todos entre sus actividades oficiales.

Con esta maniobra, el Príncipe utilizaba la parte de su dotación que corresponde a gastos de representación para pagar facturas privadas. Dicha dotación ha sido motivo de queja constante por parte del hermano del rey Felipe, quien ha declarado en varias ocasiones que la cantidad monetaria no era suficiente para mantener el nivel de vida tanto suyo como de su mujer e hijos.

"Mi familia nunca me ha apoyado", comentó en mayo a la televisión RTBF. Meses después, su ataque ha ido a más: "Esto comenzó con mi tío, el rey Balduino, y después con mi padre". Ahora, la situación no parece haber cambiado con la proclamación de su hermano como Rey. "Felipe ha cometido el error de aceptar un entorno que quería perjudicarme e impedirme trabajar", dice y añade: "Toda mi vida han bloqueado mis actividades, es complicado trabajar así", se queja.

No es de extrañar este control por parte de los diferentes monarcas hacia las actividades de Lorenzo, ya que siempre han resultado del todo polémicas, a pesar de estar englobadas en una fundación en defensa del medioambiente. Unas de las más controvertidas fueron sus alianzas empresariales con los hijos de Gadafi o en la República Demoncrática del Congo. Estas decisiones no contaron con el apoyo del gobierno belga. Incluso, provocaron que fuera llamado al orden en 2011, obligando a su padre, el rey Alberto, a rebajarle su dotación personal y apartarle de toda actividad de representación.