Elio Valderrama, devastado tras la muerte de Jesús Mariñas, su marido

El mítico periodista Jesús Mariñas, referencia en el ámbito de la prensa rosa, ha fallecido este martes tras perder su larga batalla contra el cáncer. Fue ingresado de urgencia hace semanas y, aunque ha sufrido altibajos, al final la peor de las noticias se ha producido.

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Genio y figura hasta el final, el enfant terrible de la crónica social ha sido él mismo hasta el final. A sus 79 años, y ya muy enfermo y en la habitación del hospital, ha compartido imágenes con humor y hasta vivió altercados con los sanitarios cuando la ambulancia que le recogió no quería cumplir sus órdenes.

Elio Valderrama siempre ha estado en un discreto segundo plano, pero al pie de la cama de Jesús, y ahora el fotógrafo de origen cubano vive en primera persona el dolor y el duelo por la pérdida del amor de su vida

Mariñas ingresó a finales de marzo en el madrileño Hospital Ramón y Cajal "con pronóstico reservado". Mariñas hubiera cumplido 80 años dentro de unos meses y todavía decía que tenía fuerza para continuar con su trayectoria profesional. Fue testigo de acontecimientos históricos dentro de la prensa del corazón y aportó momentos inolvidables de la televisión en programas como el mítico Tómbola, donde acuñó su famoso ¡Que te calles Karmele!

Fue su marido Elio quien avisó a la ambulancia aquel jueves 31 de marzo a última hora de la tarde cuando saldría Jesús para no regresar.

Elio ha estado al lado de Jesús Mariñas en los momentos más duros y es una de las pocas personas que conocía sus secretos, o qué enemigos tenía Mariñas.

El periodista estuvo más de tres décadas hablando e informando de la vida de los famosos del momento, pero poco se conocía mucho de la suya.

Protagonizó grandes desencuentros que pasarán a la historia de la prensa rosa y es un profesional bastante respetado. Sus compañeros saben que tenía mucho carácter, por eso no cruzaban los límites que marcó hace mucho tiempo.

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Elio Valderrama, siempre tan discreto, no fue muy dado en vida de su marido a conceder declaraciones y menos a profundizar en la gravedad de la enfermedad que ha acabado con la vida de Jesús.

Está claro que "el pronóstico era muy delicado", nos repiten desde el entorno del periodista y que el paciente quería proteger su intimidad, aunque su vida se basara en cierto modo en descubrir la de otros.

Jesús quería que le atendieran los médicos del Hospital Ramón y Cajal porque es allí donde había recibido desde el principio el tratamiento contra el cáncer.

Nos aseguran que Mariñas no había perdido su característico sentido del humor, lo cual ayudó a sus seres queridos, a sobrellevar tan difíciles momentos, los más complicados, ya que los más cercanos sí sabían del alcance de la enfermedad y lógicamente estaban muy preocupados por él.

Valderrama y Mariñas llevaban juntos 33 años y formaban un equipo estupendo. Fueron protagonistas como personajes y como reporteros de portadas y noticias en las mejores revistas, y llegaron a ser una pareja influyente en el ámbito de la información rosa.