Rocío Carrasco rebaña audiencia para su docudrama recorriendo los platós de Mediaset
J. Moriarty
En Telecinco ni se imaginaban que las nuevas entregas del docudrama de Rocío Carrasco fueran a tener tan poca audiencia (comparadas con las de la pasada temporada). El culebrón de Montealto, como ya hemos publicado en Informalia, sale perdiendo frente a espacios de Antena 3, como El Hormiguero o Tu cara me suena.
Por eso, hay cambio de estrategia para potenciar la figura de la hija de Rocío Jurado, y la fórmula es sentarla en el plató de los programas más punteros de la cadena amiga, como el matinal de Ana Rosa Quintana.
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El morbo estaba servido desde el momento en que es el programa en el que colabora semanalmente su hija, Rocío Flores, producido por los 'rivales' de La 'Fábrica de la tele'.
A la hija de Antonio David Flores le ha pillado por sorpresa esta visita, en cierto modo se siente traicionada por su productora por llevar al plató a su progenitora, con la que no tiene el menor contacto desde hace años.
Para Ro es un golpe bajo, no se esperaba algo así. Y menos que su madre fuera a hablar sobre ella en su lugar de trabajo.
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Ciertos rumores apuntan a que la nieta de 'La más grande' podría haber recibido una suculenta oferta para protagonizar su propio docudrama, para contar, al igual que hace su progenitora, su verdad públicamente.
Esta es la guerra de nunca acabar, batalla tras batalla, el cisma familiar se hace más grande. Nadie se libra de los ataques, todos reciben andanadas. Seguramente, si Rocío Jurado levantara la cabeza se avergonzaría de los enfrentamientos familiares y se le partiría el corazón de ver a sus hijas enfrentadas y a su nieta en guerra con su propia madre, y más en público, con toda España de testigo y con dinero de por medio. Ella, que tanto luchó en vida por unir a todos los suyos…