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Muere Pedro Arriola, marido de Celia Villalobos: fueron el matrimonio más poderoso del PP
Informalia
Pedro Arriola, esposo de la ex ministra y ex alcaldesa de Málaga Celia Villalobos, murió este jueves a los 74 años. Fue lo que se llama 'fontanero' de Aznar, lo que luego sería Iván Redondo para Pedro Sánchez. Algo así como el asesor demoscópico de los gobiernos de Aznar.
Sevillano de nacimiento, Arriola fue el inventor de la famosa frase del "¡Váyase señor González!", además de sobrino del poeta Juan Ramón Jiménez. De 74 años, era además el marido de la exministra popular Celia Villalobos. Arriola también trabajó con los gobiernos de Mariano Rajoy. Su labor abarcaba desde los estudios demoscópicos hasta la asesoría de estrategia de comunicación e imagen de los líderes y políticos del PP.
Fue en 1989 cuando José María Aznar, a la sazón candidato popular, lo fichó como asesor personal. Aznar ganó las elecciones y llegó a Moncloa en 1996. También participó en los diálogos entre el gobierno de Aznar y la banda terrorista ETA en Suiza junto con Francisco Javier Zarzalejos y Ricardo Martín Fluxá durante la tregua de 1999.
Enfrentado al sector liderado por Esperanza Aguirre, tras la marcha de Aznar, Arriola continuó en el PP con Rajoy. Con Pablo Casado abandonó definitivamente sus labores en el partido después de treinta años. Arriola y Villalobos llegaron a ser sin duda el matrimonio con más poder ha tenido en el PP. El sociólogo facturaba al partido a cambio de informes y explicaciones concretas tanto al presidente como a la secretaria general. Tenía, además, línea directa con Rajoy y Aznar, tanto en La Moncloa como en Génova.
Celia Villalobos
Hasta este jueves, Arriola y Villalobos fueron el matrimonio más longevo de la política española. Celia Villalobos (1949) vivió junto a su marido, aunque con su propia carrera, en las sombras del PP, en las cañerías de Génova, desde Manuel Fraga hasta la llegada de Casado.
Ahora, tanto ella como su marido vivían de sus jubilaciones, de las rentas de su patrimonio y de bolos como la participación de la ex alcaldesa malagueña en Masterchef. Sus preocupaciones tenían más que ver con sus cuatro nietos que con la política, aunque los últimos años en el partido fueron complicados. Acusaron a Arriola de dejar crecer a Podemos.
Villalobos se marchó del Congreso cuando el PP de Casado ya pensaba excluirla de las listas electorales, y puso fin a su etapa política. Ella figura junto a su marido como accionista (48,35%) en la sociedad denominada Instituto de Estudios Sociales, que es la firma demoscópica con la que Arriola facturaba al PP. Villalobos también dispone de un 27,5%, en el mismo régimen de gananciales, en Consultores de Investigación Social, una segunda firma de su marido, ahora fallecido.
Arriola abandonó hace dos años sus responsabilidades en ambas sociedades. Según consta en el Registro Mercantil, el asesor áulico del marianismo y del aznarismo dejó de ser administrador único de Instituto de Estudios Sociales y de Consultores de Investigación Social para dar paso a su hija, Amaya Vanesa Arriola Villalobos.
Celia Villalobos estuvo en el Congreso durante diez legislaturas ininterrumpidas en las que también fue ministra de Sanidad y Consumo y alcaldesa de Málaga. Tienen dos viviendas, una en Madrid y otra en Torremolinos, adquiridas en 1987 y 1992, respectivamente, en régimen de gananciales junto a su marido, con el que vivía en su residencia de la capital.
Celebrity
Celia Villalobos siempre fue más mediática que su marido, un hombre más bien de trastiendas, y además a Celia le gusta figurar, como lo demuestran sus numerosas participaciones en medios o en la quinta edición de Masterchef Celebrity o sus memorias profesionales.
Planeta editó su libro, publicado en 2020, donde repasa sus años en la política y recuerda las mujeres que marcaron un antes y un después en el PP, como Rita Barberá o Isabel Tocino. La ex alcaldesa también habla en sus memorias de Antonio Banderas o la baronesa Thyssen, con quien coincidió en sus años en el Ayuntamiento de Málaga, cuando Tita Cervera abrió allí su museo.
También cuenta en sus memorias cómo y dónde conoció a doña Letizia. Fue en mayo de 2001, cuando Villalobos aún era ministra de Sanidad de José María Aznar, durante la crisis de las vacas locas, o sus enfrentamientos con la OMS, organismo del que la malagueña dice en su libro que es "inútil".
Letizia fue como periodista a entrevistarla a su despacho en la primavera de 2001 con motivo del Día Mundial sin Tabaco. De la reina, dice Villalobos que aporta "modernidad y cercanía para la Casa Real".