Muere Shane, el hijo de 17 años de Sinéad O'Connor
Informalia
Shane, el hijo de 17 años de la cantante Sinéad O'Connor, ha sido encontrado muerto tras permanecer desaparecido desde el pasado jueves, 6 de enero.
"Mi hermoso hijo, Nevi'im Nesta Ali Shane O'Connor, la luz misma de mi vida, decidió terminar su lucha terrenal hoy y ahora está con Dios", ha escrito la propia la cantante, de 55 años de edad, en su cuenta de Twitter.
La policía irlandesa había lanzado un llamamiento a la ciudadanía para buscar al joven, informa el medio británico Mirror. En medio de su búsqueda, la propia cantante lanzó un mensaje público a su hijo pidiéndole que volviese a casa y no se hiciera daño.
"Shane, tu vida es preciosa. Dios no esculpió esa hermosa sonrisa en tu hermoso rostro por nada. Mi mundo colapsaría sin ti. Tú eres mi corazón. Por favor, no dejes de latir. Por favor, no te hagas daño. Ve al Gardai (policía irlandesa) y te llevaremos al hospital", escribía el mismo día 6 de enero. La noche de este viernes, la propia policía confirmaba que se había encontrado muerto al joven. "Tras la recuperación de un cuerpo en el área de Bray de Wicklow el viernes 7 de enero de 2022, se ha finalizado la búsqueda de Shane O'Connor, de 17 años", señaló un portavoz.
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Como su madre, Shane padecía algunos problemas de salud mental, y el joven se encontraba bajo vigilancia por riesgo de suicidio en un centro médico y no era la primera vez que se escapaba. Fue en 2019 cuando la cantante anunció por primera vez que su mismo hijo había desaparecido, y por aquel entonces tenía solo 14 años. El joven Shane Lunny era fruto de la relación que O'Connor mantuvo con el cantante folk Dónal Lunny. Además, la artista tiene otros tres hijos: Roisin Waters, Jake Reynolds y Yeshua Bonadio.
La traumática vida de de Sinead O'Connor
La tragedia vuelve a marcar la vida de la autora de Nothing Compares 2 U que tuvo en vilo al mundo entero en las navidades de 2015 cuando fue hallada y rescatada por la Policía en un hotel de Dublín tras haber anunciado en su cuenta de Facebook que había ingerido una sobredosis. Afortunadamente la Policía llegó a tiempo.
Esta no fue la primera vez que la cantante intentó quitarse la vida. Una semana antes del trágico suceso una amiga aseguró que ya había amenazado con suicidarse y en 1993, cuando tenía 33 años, llevó a cabo otra intentona. Sinéad O'Connor contó en 2007, en el popular programa de Oprah Winfrey, que hacía tiempo que le habían diagnosticado un trastorno bipolar.
O'Connor ha llevado una vida atormentada desde su niñez. Su padre -un abogado- y su madre se divorciaron cuando tenía ocho años, algo especialmente traumático en la muy católica Irlanda de entonces. Sinéad quedó a cargo de su progenitora, que la sometió a maltrato físico. Cuando volvió con su padre fue sorprendida robando en una tienda y la internaron 18 meses en una institución para mujeres descarriadas, donde según ella sufrió todo tipo de vejaciones.
Tras escapar a Dublín se buscó la vida cantando con su guitarra en calles y pubs, hasta que la descubrieron los dueños de una pequeña discográfica inglesa. O'Connor ya había dado aviso de su talante polémico cuando en 1989 apoyó la violencia del IRA, aunque luego se retractó. En 1990 se negó a permanecer en un escenario de Nueva Jersey cuando sonaba el himno estadounidense. Al año siguiente boicoteó la entrega de los Grammy y no quiso recoger su premio alegando que los galardones eran demasiado comerciales. En 1992 levantó una enorme polvareda al romper una foto del Papa Juan Pablo II en un programa de máxima audiencia en EE.UU. Tres años después se ordenó sacerdotisa por una secta escindida del catolicismo, la Iglesia Latina Tridentina, que llegó a ascenderla a archidiácono por su distinguida labor con los sin hogar dublineses.