Britney Spears no quiere perder la tutela de su padre: sabemos cuál es su verdadera 'guerra'

Britney Spears lleva ya 12 años bajo la tutela legal de su padre, Jamie, que la solicitó ante el juez alegando problemas de salud mental en su hija. Tras la recuperación de la artista, esta detectó algunos movimientos en sus cuentas con los que no estuvo de acuerdo y trató de recuperar el control de su carrera y su dinero. El próximo 23 de junio, Spears, de 39 años, se sentará por primera vez ante el juez pero no para recuperar su tutela, sino para solicitar que la conservadora exclusiva de su patrimonio sea Jodi Montgomery, puesto que ahora comparte con su padre.

Según publica este miércoles TMZ, Britney no se siente atrapada bajo la tutela de su padre, tal y como se ha publicado estos años. "Tiene el 99% de la libertad que tendría si no estuviera en una tutela, y lo único que se le ha impedido hacer son cosas locas, como comprar tres coches a la vez (algo que intentó hacer en el pasado)", ha desvelado una persona cercana a la familia. "Britney ha tenido la libertad de viajar, va a Hawái con bastante frecuencia, y vive su vida en Los Ángeles sin restricciones reales".

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Entonces, ¿cuál es el problema entre Jamie y su hija? Al parecer, el padre tomó algunas decisiones respecto a los negocios de la artista que a ella no le gustaron. Además, contrató a algunas personas que no son del agrado de la cantante, pues Britney cree que actúan de manera egoísta sin pensar en sus intereses. Estas desavenencias distanciaron a padre e hija, que mantienen una relación muy tensa desde hace años.

Britney sabe que lo mejor para ella es que Jamie la tutele pero no quiere que maneje sus negocios y le pedirá al juez que este poder se lo otorgue, en exclusiva, a Jodi Montgomery, agente de Bessemer Trust Company, una empresa de asesoría de inversiones y gestión patrimonial que comparte estos derechos con Jamie desde el pasado mes de noviembre por orden del juez: "Britney quiere que Jodi se encargue de todo", dice TMZ.