Tamara Falcó, de cena con su novio tras deslumbrar con un vestido rojo con escotazo de anuncio
Luisa Acevedo
Después de asistir a un acto publicitario en el que deslumbró con un impresionante vestido rojo, Tamara Falcó se cambió el atuendo y se vistió de casual para irse de cena con su nuevo novio, el atractivo diseñador de coches Iñigo Onieva de 31 años. Los dos se dejaron ver algo nerviosos a la salida de un restaurante.
La hija de Isabel Preysler y su novio quedaron para cenar con varios amigos que tienen en común. Tímidamente respondía a las preguntas de los paparazzis que la esperaban a la salida del local: "Todo bien, gracias", se limitó a decir amablemente. En cuanto salieron del restaurante cada uno tomó una dirección distinta para evitar momentos incómodos con la prensa.
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Apenas unas horas antes, Tamara puso patas arriba el papel couché tras enfundarse en un despampanante vestido rojo de Pronovias para grabar un anuncio publicitario de Sisley. La hija de Carlos Falcó, que grabó en un céntrico hotel de Madrid, parecía toda una estrella de Hollywood y demostró tener tanta elegancia vistiendo como su madre.
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Se trata de un vestido largo de escote bardot, con voluminosas mangas caídas que dejaban al descubierto sus hombros. El vestido también dejó al aire su espalda, es ceñido a la cintura y con pronunciada caída en la falda. Además, le aportaba un toque sexy gracias a la ligera apertura de la pierna izquierda.
Tamara e Iñigo van muy enserio en su relación, hasta el punto de que la colaboradora de El Hormiguero está preparada para tomar una radical decisión. Tal y como recogió Semana este miércoles, Tamara considera que es el momento idóneo para encontrar otra vivienda de lujo en Madrid. La revista la fotografió con su madre buscando piso en una exclusiva zona de la capital, Puerta de Hierro, un lugar muy cercano a la casa de su progenitora. Estos últimos días los tortolitos también se comieron a besos en una terraza de la capital.